Instagram no para de reinventarse. Si hace unos meses decidieron eliminar la pestaña de seguidos, han dado un paso más en la privacidad y la última estrategia de esta red social es esconder el número de me gustas que recibe una publicación, para que solo lo vea la persona que ha publicado el contenido. Una táctica que ya implantó hace dos meses Facebook y que en un principio se iba a realizar únicamente en Estados Unidos, pero que finalmente se ha realizado a nivel global.
Sin embargo, se trata de una beta, y según ha confirmado la portavoz de Instagram a diferentes medios, solo afecta a un reducido grupo de usuarios de cada país, que desde este viernes ya disfrutan de esta nueva versión. Asimismo, la compañía asegura que el feedback que está obteniendo por esta medida es positivo, pero necesitan seguir con las pruebas, puesto que se trata de un cambio drástico en el funcionamiento de la aplicación.
Instagram justifica esta decisión aludiendo a la "tiranía del like" que sufren cada vez más usuarios, y que hace que estos vivan pendientes de la cantidad de me gustas que obtienen. Sin embargo, la actualización no ha gustado a todo el mundo. Los influencers temen esta medida, puesto que estos hacen negocio con otras empresas debido a su número de likes, y si pierden este poder, tendrán más difícil que prestigiosas firmas se fijen en ellos.
