Hay dos momentos en el año en el que nos dejamos llevar. Uno es la Navidad, época durante al cual el consumismo desbordado nos reconcome con unas consecuencias evidentes unas semanas después ¿recuerdas la expresión ‘cuesta de enero, febrero, marzo'...?. Pues eso.

El otro instante en el que la emoción de los lugares desconocidos, estar con los amigos, descubrir nuevos amores o participar en alguna que otra fiesta tiene también su repercusión al cabo de un tiempo, es el que vivimos ahora mismo, es decir, el verano.

En estos meses nos dejamos ir en esto de las nuevas tecnologías. Probablemente el fenómeno comience con la compra de algún gadget que, en realidad, es solo un capricho. Su coste lo ves al momento cuando observas como esa misma cantidad del precio desaparece de tu cuenta.

El riesgo se encuentra en lo que no puedes comprobar –o no quieres- hasta dentro de unas semanas. Y aquí la palma se la lleva el smartphone.

Si no quieres tener un disgusto que te haga recordar las vacaciones de este año, no por ese cuscús en Marrakech o esa cervecitas en Praga, sino por la factura de móvil deberías tener en cuenta una serie de consejos para evitarlo.

Más de "1.000 combinaciones"

Según señalan en un comunicado desde el comparador de tarifas de teléfono e internet Roams existen tantas tarifas “como lugares de vacaciones”. En concreto, en España hay “más de mil combinaciones” y llaman la atención sobre evaluar las necesidades durante el verano y ver qué tarifa beneficia a los usuarios.

Siguiendo lo que indican los expertos de Roams se pueden extraer hasta 5 consejos a tener en cuenta para no caer en una depresión post vacacional debido al agujero telefónico.

El primero se refiere a las llamadas desde el extranjero. Dicen desde Roams que existen dos opciones. Bien contratar una tarifa en destino o antes del viaje. En ambos casos, los beneficios dependen del país al que vayamos. Para el CEO de este comparador; Eduardo Delgado, “en Latinoamérica y Asia es aconsejable contratar tarifas en el destino, ya que los precios son más competitivos. Sin embargo, si viajamos a Europa, Estados Unidos o Canadá, es mejor contratar la tarifa desde España porque conseguiremos mejores condiciones”.

¿Y el roaming pa’cuándo?

En vacaciones también hay que hablar del roaming. Más tarde de lo deseado la UE fijó ciertos criterios que benefician al usuario. Sin embargo, esto solo sucede en países de la Unión Europea. Y aquí entra en juego el segundo consejo que ofrece el experto en telefonía y tarifas del comparador, Rodrigo San Martín. Si se va a viajar fuera de la UE afirma que “tenemos que informarnos de si nuestro operador dispone de acuerdo para darnos servicios en el país al que vamos y de qué incluye nuestra tarifa”.

Relacionado con lo anterior, pero con una recomendación propia (la tercera) se encuentra el binomio compuesto por roaming prepago.

Para Delgado se debe considerar una excepción a la compatibilidad de roaming y móvil de prepago: “Las operadoras pequeñas u OMV están exentas por ley de dar servicio roaming internacional si no tienen capacidad para hacerlo. Así que si tienes contratado un operador muy pequeño o local es mejor que lo confirmes con ellos antes de emprender tu viaje”.

El consumo de datos es uno de los grandes quebraderos de cabeza durante el asueto estival.

Un clásico que no puede faltar aquí y al que dedicamos el cuarto consejo es el consumo de datos. En los tiempos modernos los datos de nuestro móvil son casi más importantes que el calzado que llevamos. En vacaciones gusta mostrar donde estás (cuanto más lejos mejor) y desde todos los puntos de vista; de ahí que el consumo de datos suba de manera notable en esta época del año.

Consumo de datos

Si a esto le unimos esos momentos, por ejemplo, de trayecto entre un lugar y otro en los que se está conectado para escuchar música, consultar redes sociales o ver películas y series, sin olvidar que a mediados empieza la liga de fútbol y a finales se disputa el Mundial de Baloncesto en China, entonces ya salen las cuentas de los gigas gastados.

Para que te hagas una idea, según resaltan desde Roams ver un capítulo de una serie de entre 20 y 40 minutos puede consumir entre 200 y 600 MB, y una película de 90 o 120 minutos una media de 1 GB en formato 1080, que se dispara en 4K.

Y a esto hay que sumar las videollamadas. Llamar a familia o amigos y enseñarles el sitio tan maravilloso desde el que lo hacemos se lleva de media entre 3 y 10 MB por minuto, aunque esto depende de la app que usemos para llamar.

Los expertos del comparador de telefonía e internet, al margen de ir comprobando cada cierto tiempo el consumo que llevamos acumulado, recuerdan que, si consumimos todos los datos, normalmente las operadoras no tienen un coste extra “aunque habría que revisar las condiciones de cada tarifa”, recomiendan.

El último de los consejos para no llevarse un susto con la factura del móvil que sigue a las vacaciones es, tal vez, el más simple de todos y al que primero deberíamos prestar atención: las ofertas de las diferentes operadoras.

Antes de irte a tu merecido asueto estival echa un vistazo a las rebajas de verano –sí, en esta época también proliferan en este mundo- porque a lo mejor, con un descuento de aquí y otro de allá, lo que podría ser una tragedia, se convierte en un repaso nostálgico de las fotos tomando el cuscús en Marruecos o la birra en el país donde más se consume por persona del mundo.