La vida de Dani Alves ha dado un nuevo giro. El exfutbolista brasileño, que lo ganó todo con el FC Barcelona, ha reaparecido públicamente en un escenario distinto al que acostumbraba cuando pisaba los terrenos de juego: una iglesia evangelista de Girona. Lejos de las portadas de los medios deportivos, Alves fue visto frente a un pequeño grupo de fieles, micrófono en mano, hablando con la convicción de quien ha pasado por el fuego y ha encontrado en la fe una nueva motivación.
“Hay que tener fe, hermanos míos, yo soy la prueba de eso”, proclamó el brasileño, visiblemente emocionado. “Porque aquí lo que Dios promete, es lo que Dios cumple. En medio de las turbulencias, en medio de la tempestad, siempre hay un mensajero de Dios. Y ese mensajero en el peor momento de mi vida me recogió, me llevó para la Iglesia, para el camino, y hoy estoy en el camino gracias a ellos”, aseguró.
El exjugador del Barça, Dani Alves, se ha convertido en predicador en una iglesia de Girona. Fue absuelto de un delito de agresión sexual este año.
— Albert Ortega (@AlbertOrtegaES1) October 27, 2025
"Hay que tener fe en Dios. Yo soy una prueba de ello. Yo hice un pacto con Dios". pic.twitter.com/H6KjoJXyaH
Su conversión llega en una de las etapas más oscuras de su vida. En diciembre de 2022, Alves fue acusado de agresión sexual en una discoteca de Barcelona, un caso que lo llevó a pasar 14 meses en prisión preventiva. Fue condenado a inicios de 2024 a cuatro años y medio de cárcel, pero en marzo de 2025, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) anuló la sentencia por unanimidad al detectar inconsistencias en las pruebas. Pese a su posterior absolución, tanto la víctima como la Fiscalía del Tribunal Supremo presentaron un recurso el pasado mes de mayo, argumentando que la sentencia del TSJC fue “absolutamente arbitraria, irracional y extraordinariamente injusta para la víctima”.
Tras su salida, el exjugador rehízo su relación con la modelo Joana Sanz, de quien se había separado durante el proceso judicial. Hace unas semanas, ambos anunciaron el nacimiento de su primera hija, un hecho que Alves ha descrito como “una bendición divina”. Desde entonces, su vida parece girar en torno a la familia y la espiritualidad. “Yo hice un pacto con Dios”, declaró ante los presentes, dejando entrever que su fe no es un episodio pasajero, sino el eje central de su nueva etapa.
La Iglesia Evangelista: fe, comunidad y renacimiento personal
El refugio espiritual al que Dani Alves ha acudido en Girona pertenece al movimiento evangelista, una rama del cristianismo que se caracteriza por su enfoque en la fe personal, la lectura directa de la Biblia y la relación íntima con Dios, sin la estructura jerárquica tradicional de otras iglesias. A diferencia del catolicismo, que cuenta con una organización central y sacramentos definidos, las iglesias evangelistas funcionan de manera más autónoma, con comunidades locales donde los pastores o predicadores guían el culto a través de testimonios, música y mensajes inspiradores.
En estos templos, la transformación individual ocupa un lugar central. No es raro que personas que han pasado por situaciones límite —adicciones, conflictos personales o experiencias judiciales, como el caso del exfutbolista brasileño— encuentren en la fe un nuevo sentido de dirección. El evangelismo propone que cada creyente pueda tener una relación directa con Dios, sin intermediarios, y que la redención está siempre al alcance de quien la busque sinceramente.
Los cultos suelen ser más emotivos y participativos que las misas católicas: se canta, se ora en voz alta, y los fieles comparten testimonios personales. Este ambiente de cercanía y comunidad puede resultar especialmente atractivo para alguien como Alves, que vivió durante años bajo la presión mediática y el juicio público.
En España, el número de fieles evangelistas ha crecido de forma notable en las últimas dos décadas, con comunidades especialmente activas en Cataluña, Madrid y Andalucía, muchas de ellas impulsadas por congregaciones brasileñas y latinoamericanas. Este fenómeno no es exclusivo de España: en toda Europa, el movimiento evangelista ha experimentado un crecimiento sostenido, impulsado en parte por la inmigración y por la búsqueda de experiencias religiosas más personales y emocionales, en contraste con la tradición católica o protestante más institucional.
Sin embargo, este auge también ha despertado críticas y controversias. Algunas iglesias han sido señaladas por prácticas poco transparentes en el manejo de donaciones, por promover visiones excesivamente rígidas sobre la moral o por ejercer un control psicológico sobre los fieles, especialmente en comunidades vulnerables. En ciertos casos, la figura del pastor se ha vuelto tan influyente que el mensaje espiritual termina confundiéndose con la devoción personal hacia el líder religioso.