El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, cree que "faltan aspectos importantes" a derogar de la reforma laboral de 2012 en el acuerdo entre PSOE y Unidas Podemos presentado este martes para la investidura de Pedro Sánchez y la conformación de un Gobierno de coalición, y espera que "al final se pareciera más a una derogación total que parcial de los aspectos más lesivos"

Tras conocer el documento presentado por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias en el Congreso, Álvarez ha señalado en declaraciones a Europa Press que su valoración es "positiva", que creen que es "una declaración de principios", y que toma este acuerdo "como un documento para negociar".

En este sentido, ha celebrado la concreción de cuestiones como la objetivación del despido, la negociación colectiva o la prevalencia del convenio de sector frente al de empresa pero espera que se cuestionen "los descuelgues patronales para que no sea un coladero" y que se corrija la capacidad del Estado para aprobar los expedientes de despido colectivo.

Respecto al salario mínimo, al marcar el objetivo del 60% del salario medio a final de legislatura - hoy supondría 1.153 euros, ha dicho - cree que "no deja a nadie capacidad de veto" y que la subida "viene a suplir la falta de compromiso de las patronales para dar cobertura a los trabajadores, incluso para cumplir lo acordado". "Si no hay convenio, hay salario mínimo", ha aseverado.

Por otro lado, ha valorado positivamente el acuerdo en pensiones para derogar el factor de sostenibilidad previsto en la reforma de 2013 y su fórmula de revalorización, aspectos como los de bomberos forestales en la función pública y la renta mínima prevista para las familias más vulnerables, en línea a la iniciativa legislativa popular que plantearon los sindicatos hace ya dos legislaturas.