La Unión General de los Trabajadores y Trabajadoras (UGT) ha inaugurado este miércoles un nuevo curso con el análisis de la situación económica, política y social y la presentación de los nuevos retos por parte de su secretario general, Pepe Álvarez. El líder sindical ha explicado las negociaciones pendientes con Gobierno y empresarios y ha lanzado un mensaje muy claro al Ejecutivo: “Puede plantar perfectamente al Gobierno en las mesas de negociación”.
“El Gobierno tiene que saber que, en la medida en que no haya acuerdo y no tome una decisión sobre el SMI, en las mesas de negociación vamos a estar en una situación de mucha más incomodidad y, si no hay conclusión, desde luego el Comité Confederal de UGT puede perfectamente plantar al Gobierno en las mesas en las que está en estos momentos”, ha amenazado Álvarez.
Asimismo, el secretario general ha anunciado movilizaciones si no se produce esta subida, que el sindicato sitúa entre los 25 y los 30 euros: “No vamos a quedarnos de brazos cruzados si el Gobierno continúa con la decisión de no subir el SMI. No nos quedamos antes y no lo vamos a hacer. Las perspectivas de la pandemia y del otoño creo que nos permiten ir a un proceso de movilizaciones mucho más amplío al que hicimos previamente”.
Álvarez ha denunciado también la actuación del Gobierno en las negociaciones: “No me parece de recibo esta situación que venimos arrastrando desde el mes de enero con el SMI, parece que el Gobierno habla para él mismo. Un ministro se contesta a otro, una vicepresidenta se contesta a la otra. Con quien tiene que hablar y negociar es con quien tenemos representación legitima, que somos los sindicatos y las asociaciones empresariales”.
Críticas a la CEOE
Estas declaraciones van en línea de la reunión fallida entre el Ministerio de Trabajo y los agentes sociales para abordar la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y la negativa de la CEOE a aprobar esta medida. Así, Álvarez también ha tenido palabras para la patronal: “Sería conveniente que los responsables públicos cuando hablen del SMI sepan bien a quien le afecta”. El secretario general de UGT se refiere así a que “incluso el sector primario, el más afectado, ha tenido crecimiento en el 2020”.
Por otro lado, ha criticado la propuesta de la CEOE de diseñar un SMI por territorios: “No sé si quieren que haya 17 SMI o 48 […] o lo que en realidad está diciendo es que no quiere que se suba el SMI porque curiosamente en aquellas comunidades donde hay más trabajadores afectados por el SMI son las que la CEOE quiere establecer un SMI propio. Para Madrid y Barcelona seguramente que tiene poca trascendencia, pero tiene mucho para Extremadura, Andalucía o para Murcia”, critica.
“A mí me parece que si la patronal no explica todas las razones objetivas por las que no quiere llegar a un acuerdo en materia de SMI nos lleva a todos a pensar que efectivamente hay un cambio que tiene más que ver con la coyuntura política que se vive en este país que con la sustancia que representa la subida del SMI”, continuaba el líder de UGT.
Sin embargo, pide a los empresarios que se acojan al acuerdo: “Los empresarios tienen que ser conscientes de que no estar, no firmar, no concluir las negociaciones, tiene consecuencias para la sociedad”. “Si firma la CEOE el acuerdo siempre es más equilibrado. En ese sentido me parece que aporta más al conjunto del sistema productivo, aunque eso a veces vaya en detrimento de la posición de los sindicatos”, considera el representante de UGT.
Subida del SMI: "Tiene que ser inminente. Tenía que haber sido ayer"
El líder ha recalcado sus palabras de las últimas semanas sobre la subida del SMI y ha asegurado: “Tiene que ser inminente. Inminente quiere decir inminente. Tenía que haber sido ayer. Es un tema que teníamos que haber zanjado antes del 1 de septiembre. No hay ninguna razón para no hacerlo. Las negociaciones están agotadas, todo el mundo sabe lo que opina todo el mundo”.
“No podemos descartar que la CEOE se sume al pacto, sobre todo por la experiencia de los últimos meses. Hemos estado muchas veces al borde del no acuerdo en múltiples negociaciones y finalmente se ha acordado ese punto de equilibrio. Creo que los empresarios de nuestro país tienen mucho que perder si no están en la firma del acuerdo. No sale gratis no firmar los acuerdos”, ha declarado esperanzado Pepe Álvarez ante los medios de comunicación.
En esta línea, ha alertado de que la no firma del acuerdo por parte de la patronal “es un mal presagio para el resto de negociaciones que hay en marcha. No creo que tengamos que descartarlo, sino todo lo contrario, tendríamos que hacerlo posible para alcanzar el acuerdo para los próximos tres años, de tal manera que también generara estabilidad y confianza para las empresas de nuestro país”.
