Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE), ha dejado aparentemente abierta la puerta a una subida de los tipos de interés en 2022, una novedad que difiere de la negativa de las ocasiones anteriores. La máxima responsable del BCE prevé altos niveles de inflación durante más de lo previsto y pretende responder a la escalada con esta subida de tipos.

No obstante, la subida de tipos de interés no se producirá ahora, sino que Lagarde se ha emplazado hasta la próxima reunión, en marzo, con más datos sobre la mesa para evaluar su posición. Así lo desvelaba la presidenta del banco central en la rueda de prensa posterior celebrada tras la reunión del Consejo de Gobierno del BCE.

La banquera francesa reconocía que la inflación seguía sorprendiendo al alza, lo que le permite anticipar que estas fuertes subidas de los precios se mantengan durante más de lo previsto. No obstante, asegura que esta subida frenará a lo largo de 2022, tal y como prevén el resto de organismos económicos.

Según Lagarde, los riesgos para las perspectivas de inflación “están sesgados al alza”, especialmente en el corto plazo. Aunque ha matizado que la principal presión sobre los precios corresponde al encarecimiento de la energía, ha reconocido que un mayor nivel de inflación ha afectado a la actividad económica europea en el arranque de 2022, por el impacto sobre los ingresos y el consumo de los ciudadanos.

Con este panorama, la presidenta del BCE ha defendido la necesidad de mantener la “flexibilidad y opcionabilidad” de la política monetaria, asegurando además que el BCE está listo para adaptar todas las herramientas necesarias. Así, Lagarde ha reconocido que en el seno del Consejo de Gobierno del banco central hay una “preocupación unánime” sobre la inflación y su impacto, soportado en mayor medida por los más vulnerables.

El BCE actualizará su cuadro macro en la próxima reunión

El BCE actualizará su cuadro macroeconómico en la próxima reunión, prevista para el mes de marzo. Lagarde ha retrasado cualquier posible cambio de posición sobre los tipos de interés hasta ese momento, con más información sobre el impacto de la inflación en los salarios, el mercado laboral y las previsiones a medio plazo sobre la mesa.

"Estamos guiados por la estabilidad de precios y tomar los pasos adecuados en el momento adecuado sin precipitarnos", ha afirmado Lagarde, sin descartar de forma explícita una subida de tipos de para 2022. La máxima responsable del BCE ha preferido dejar la puerta abierta a “cuando haya más datos” para realizar afirmaciones más completas.

Sin embargo, ha matizado que el BCE cuenta con una orientación de futuro con tres criterios que deben cumplirse para poder formalizar una subida de tipos. "Habrá una secuencia y no habrá subidas hasta completar las compras netas de activos" -anunciaba Lagarde en rueda de prensa- "Créanme, tan pronto como sea requerido y las condiciones sean satisfechas, actuaremos".

El propio Consejo de Gobierno del BCE ha dejado los tipos de interés tal y como estaban en su última reunión, celebrada este jueves, aunque asegura estar preparado para ajustar todos sus instrumentos, con el objetivo de estabilizar la inflación a medio plazo en el 2%. Así, por el momento los tipos de interés de referencia para la refinanciación siguen en el 0%, mientras que la tasa de facilidad de depósito continuará en el -0,50% y la de facilidad de préstamo, en el 0,25%.