Los líderes europeos han llegado este martes a un acuerdo sobre el fondo de recuperación tras la crisis del coronavirus, con una dotación total de 750.000 millones de euros, de los que 390.000 millones corresponderán a transferencias directas y 360.000 mediante préstamos que los Estados miembros tendrán que devolver a posteriori.

Además de la dotación final, los líderes también han aprobado el reparto de los fondos según los sectores, con especial hincapié sobre el sector medioambiental. El documento final asegura que al menos “el 30% de los fondos” deben destinarse a los objetivos verdes de la Unión Europea.

Uno de los más perjudicados es el Fondo de Transición Justa, ideado para ayudar a las regiones europeas productoras de carbón a reajustar sus negocios hacia una producción más verde y ecológica. En este caso, según aparece en las correcciones del borrador de la última propuesta del Consejo Europeo, la dotación para este fondo se reduce en un 66% y se queda en los 10.000 millones de euros.

Algo parecido ocurre con el fondo de inversión en ciencia, innovación e investigación, denominado Horizonte Europa, que pasa de una dotación de 13.500 a 5.000 millones de euros. En esta línea, también el fondo de inversiones Invest EU se ve afectado por las rebajas, desde los 30.300 a los 5.600 millones de euros, o el instrumento de solvencia para ayudar a empresas con problemas de liquidez, eliminado incluso antes de sellar el pacto.

La agricultura, uno de los peor parados en el reparto

La agricultura es otro de los sectores peor parados en el reparto de los fondos. En concreto, el plan diseñado para impulsar el desarrollo rural se reduce de 15.000 millones iniciales a los 7.500 millones de euros. Por otro lado, también desaparecen las dotaciones del NDICI, el instrumento de cooperación internacional, o el plan de salud.

Relacionado con el sector agrícola, la Política Agraria Común (PAC) sale especialmente afectada en el presupuesto plurianual para el periodo 2021-2027, con un recorte del 10% de su dotación hasta los 343.950 millones de euros.

Todos estos recortes se compensan con la mayor dotación del Instrumento para la Recuperación y la Resiliencia (FRR), destinada a financiar las reformas y las inversiones. En cifras, el presupuesto de este fondo se ha aumentado hasta los 627.500 millones de euros desde los 560.000 millones previstos inicialmente.