Mercadona es un modelo de negocio de éxito que no sólo capeó la crisis, sino que crece año a año. Los resultados del pasado ejercicio con 322 millones de euros en beneficios e inversiones que superaron los mil millones, señalan que el creador del imperio, Juan Roig, piensa en la expansión de la firma continuamente. El poder de Mercadona se deja sentir en sus proveedores y algunos de ellos, que durante años siguieron las exigencias del gigante (qué producir, fijar costes y precios de venta) ven ahora como de un día para otro les reduce compras, elimina gamas de producto o se les sustituye por otro proveedor.

Aceite o zumos

Algunos ejemplos de ello son las situaciones vividas por dos empresas: Sovena y el Grupo J. García Carrión. La primera es la suministradora de aceite de Mercadona, lo que le sirvió para crecer, le llevó a realizar importantes inversiones y en cinco años consiguió duplicar su facturación. Mercadona decidió de forma unilateral reducir las compras a Sovena un 15% y dio entrada como proveedores a cooperativas aceiteras.

La empresa aceitera decidió entonces poner en marcha una nueva estrategia para reorientar parte de su negocio a la exportación y fuentes de Sovena han señalado a ElPlural que "la experiencia ha sido un éxito" y aunque sigue suministrando aceite al gigante de la distribución alimentaria consideran que "hay vida fuera de Mercadona".

En cuanto al Grupo J. García Carrión, suministrador de zumos y otras bebidas de Mercadona, la historia sufre altibajos con fuertes componentes personales. El grupo García Carrión y Mercadona rompieron su relación comercial en 2006 cuando la empresa de Juan Roig decidió sustituirla por Dafsa.  J. García Carrió sufrió considerablemente el impacto en sus cuentas e intentó en varias ocasiones recomponer la relación con Mercadona.

Finalmente se han recompuesto relaciones de una forma peculiar. El propietario de Dafsa, José Luis Campillos, trasladó a Juan Roig su deseo de retirarse y buscar un comprador para su empresa. Fuentes del sector aseguran que el propio Roig presionó al Grupo García Carrión para que comprara Dafsa como condición para recuperar el papel de proveedor, algo que desde Mercadona se niega. El caso es que a finales de 2016 García Carrión compró Dafsa y volvió a ser proveedor del gigante de la distribución alimentaria -controla el 40% de la distribución del sector en España- pero en dicho grupo no están del todo satisfechos. Mercadona ha reducido las compras a J. García Carrión en más de veinte millones de euros anuales en adquisiciones de zumos, néctares y gazpachos.

"Sólo la satisfacción del cliente"

"Somos exigentes sí, pero como somos exigentes con nosotros mismos", así responden desde el departamento de comunicación de Mercadona a ElPlural.com cuando se les pregunta por las quejas de los proveedores. El gigante repite que su modelo es poner a disposición del cliente "productos de gran calidad a buen precio" y que esa es la filosofía de la empresa. En cuanto a las quejas de proveedores sobre su 'tiranía' sostienen que exigen calidad porque es lo que ofrecen a sus clientes pero también recuerdan que es "la única empresa de España que paga a 49 días".

En cuanto al interés de algunos fondos de inversión, como el chino Kam Fung o Alandra Private Equity, por adquirir algunas de las empresas suministradoras de Mercadona, señalan que es un buen síntoma y que ser proveedor de la empresa de Roig es un activo. "Si los proveedores son apetitosos para fondos es que son empresas que están bien saneadas y planificadas", señalan.