El Índice General de Producción Industrial (IPI) ha caído un 2% en noviembre con respecto al mismo mes de 2019, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De esta forma, a pesar de que se modera el retroceso anual del 6,2% registrado en octubre, la producción industrial ya encadena once meses consecutivos en tasas negativas.
En tasa mensual, la caída es del -0,9% si se eliminan los efectos estacionales y de calendario. Asimismo, la tasa anual del Índice de Producción Industrial se sitúa en el -3,8% en la serie corregida de efectos estacionales y de calendario.
Según el organismo de Estadística, casi todos los sectores productivos han registrado caídas anuales en noviembre, especialmente en el caso de la energía (-7,5%), seguido de los bienes de equipo (-5,1%) y los bienes de consumo no duradero (-1,9%). En el lado opuesto, aumentó la producción en los bienes intermedios (3,8%) y en los bienes de consumo duradero (1,2%).
En concreto, las actividades peor paradas del mes de noviembre fueron la industria del cuero y del calzado, con una caída anual del 27,3%, y la confección de prendas de vestir, con pérdidas del 17,9%. Se trata de dos de los sectores más afectados por el impacto de la pandemia desde la irrupción del coronavirus en el mes de marzo.
Tanto el confinamiento decretado por el estado de alarma como las limitaciones al ocio y las relaciones sociales han provocado una caída en las ventas de moda y calzado.
Por regiones, la tasa anual de la producción industrial mejora con respecto a noviembre de 2019 en siete comunidades autónomas mientras disminuye en otras diez. Así, los mayores incrementos se dan en Extremadura (26,4%), Región de Murcia (4,6%) y Comunidad Valenciana (4,5%). En el lado contrario, los mayores descensos suceden en Islas Baleares (-15,8%), Navarra (-9,8%) y País Vasco (-9%).
