El precio del aceite de oliva continúa disparado y acumula ya 28 meses de subidas consecutivas. El producto por excelencia de la prestigiosa dieta mediterránea es cada vez más inaccesible para las familias, que ven como tienen que limitar su consumo o acudir a otras grasas y aceites para cocinar. En julio, último mes del que existen datos disponibles, el coste para los consumidores era ya un 38,8% más alto que hace un año, lo que representa la segunda mayor subida interanual en 21 años, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE).

La subida refleja en julio, tan solo por detrás de la de abril de 2022 (42,5%), está lejos de ser una excepción. De los casi 30 incrementos encadenados, 26 se han ubicado por encima de los dos dígitos, disparando el oro líquido a precios inasumibles. Es necesario remontarse a abril de 2021, momento en el que comenzó la senda alcista, para ver una situación diferente. La sequía es el principal factor señalado por los productores, que pronostican un escenario a futuro aún más negro.

La falta de agua ha causado, por segundo año consecutivo, una mala cosecha y la producción no ha alcanzado los niveles necesarios para satisfacer la demanda. En los siete primeros meses de 2023, el aceite de oliva se ha encarecido casi un 16%. En valores mensuales, su precio ha subido en seis de los últimos siete meses y el l último dato, el de julio, refleja que el aceite de oliva costaba a los hogares españoles un 5% más que en junio.

Las estimaciones de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) dibujan una campaña 2023/2024 “negativa”, lo que traerá una nueva mala cosecha y “va a tensionar los mercados”. "En el mejor de los escenarios, en la próxima campaña, como mucho igualará la cifra de producción del año pasado (660.000 toneladas)", señalaba a finales de marzo Cristóbal Cano, presidente de UPA. "Si sumamos la campaña pasada y la futura, estamos en el entorno de 1,2 millones de toneladas, mientras que una campaña media en España está por encima de 1,3 millones de toneladas”, añadía.

El gasto medio por hogar creció 20 euros en 2022

El consumo medio de aceite de oliva por cada hogar se situó en 2022 en 22,1 litros, según se desprende de los datos del INE, lo que supone la mayor cifra desde 2018, cuando su consumo medio fue de 22,2 litros por familia. No obstante, esta cifra aún se mantiene lejos de los 30,4 litros marcados en 2007 y los productores apuntan a una caída del consumo. El consumo nacional de aceite ha caído un 50% durante el primer semestre del año, según apunta el estudio presentado por el Máster Propio en Administración de Empresas Oleícolas de la Universidad de Jaén a través de su Observatorio de Consumo.

Durante el primer año de pandemia, el consumo medio por hogar de aceite de oliva fue de 20,5 litros, cifra que fue incrementándose a medida que España recuperaba la normalidad, hasta situarse en 2022 en los 22,1 litros. Así, el gasto medio por hogar en aceite de oliva alcanzó los 97,7 euros en 2022, frente a los 77,6 euros de 2021; es decir, los hogares gastaron de media 20,1 euros más en aceite de oliva en 2022 que en el año inmediatamente precedente.

Esta cifra también es la mayor desde 2007, cuando el gasto medio por hogar en aceite de oliva se situó en 98,9 euros. Entre 2006 y 2022, el año de menor gasto en este producto básico en la llamada dieta mediterránea fue el de 2020, primer año de pandemia, cuando se alcanzaron los 65,5 euros de media por hogar. La evolución de los precios ha disparado el gasto medio por hogar, pero está mellando el consumo.

No obstante, pese al descenso, durante la campaña 2022/2023 se ha vendido más de 896.000 toneladas de aceite de oliva, 230.000 por encima de lo producido, situación posible gracias al excedente de anteriores campañas. “El incremento de precios ha provocado que el consumidor nacional haya contraído un poco el volumen de aceite que compra", lamentaba Cano, confiando en que la situación mejore y no se produzca una mayor caída.

Los supermercados se forran

La crisis del aceite está beneficiando a los supermercados, que elevan los precios hasta casi las dos cifras. Según un informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el precio del litro de aceite ha pasado de los 8,16 euros a los 9,42 euros entre julio y agosto de media entre los diez supermercados más importantes (Carrefour, Alcampo, Dia, El Corte Inglés, Hipercor, Caprabo, Mercadona, Condis, Eroski y Consum).

Las marcas que más han subido sus precios han sido, con diferencia, Carrefour, La Almazara del Olivar, Consum, Auchan y Hacendado. Todas han aumentado el precio en más de un 30%. Tan solo dos marcas han bajado el precio de sus productos: Carbonell un 5% y mar de Olivos un 1%. No obstante, esta excepción no impide a la OCU señalar que “la subida es generalizada y afecta a la práctica totalidad de todas las marcas en todas las cadenas analizadas