Telefónica cumple 95 años y su presidente ejectuvo, José María Álvarez-Pallete, se ha presentado ante los accionistas con las tres promesas que hizo a los accionistas -hace un año- cumplidas: crecer en ingresos, incrementar los márgenes y seguir invirtiendo en plataformas. "Cumplimos lo que decimos", ha afirmado Pallete ante los accionistas. 

Los ingresos de la teleco española se han incrementado un 2,4% durante el año pasado, el beneficio neto es de 3.300 millones de euros, un 6,4% más, ha reducido 14.000 millones de deuda y, a la vez, se ha hecho un esfuerzo inversor de hasta 83.000 millones de euros. 

El presidente ejecutivo de Telefónica ha calificado el ejercicio de 2018 como "un año a la altura de nuestros 95 años de historia" y ha enfatizado el esfuerzo de transformación de la compañía, para ser algo más que una mera proveedora de servicios telefónicos. "Telefónica trabaja para la construcción de una compañía para los próximos 20 a 30 años" ha reflexionado el ejecutivo. "Mientras se extiende la esperanza de vida de las personas, se acorta la esperanza de vida de las empresas" ironizó Pallete, que quiso enfatizar la importancia de saber adaptarse a los cambios. "Si nosotros hemos llegado hasta aquí, es porque supimos cambiar". 

Así, Telefónica es más que una proveedora de telefonía, a juicio de su presidente. Es ya una empresa tecnológica, al vanguardia en redes de fibra 5G, que aspira a digitalizar al 100% sus sistemas, centradas en los clientes, con el objetivo de ser "una red profundamente inteligente, al servicio del cliente gracias a la inteligencia artificial e imbuida de los valores del nuevo mundo digital". 

Tecnología y personas

Este cambio, afirmó Pallete, ha de estar basado en la "generación de valor duradera en el tiempo" y en un crecimiento "inclusivo y sostenible", que además sea eficiente. Esta eficiencia se basa, sobre todo en una gestión de activos basada en la optimización del retorno sobre el capital empleado. Y aqui ha querido defender la venta de activos en Latinoamérica. "Hicimos lo correcto", insistió. 

Pero no todo son cifras y tecnología y en el discurso también ha habido espacio para el personal de Telefónica, del cual y de su motivación, ha enfatizado, todo depende. También de su diversidad y de el equilibrio de géneros. Y las retribuciones variables de los directivos van a depender también de la percepción de los clientes, del cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU o de la eficiencia medioambiental. 

"Nuestro propósito", ha reflexionado Álvarez-Pallete, "es hacer nuestro mundo más humano, conectando la vida de las personas" en una revolución digital con enfoque humanista en la que nadie se quede atrás. "Las empresas que no tengan como valor principal contribuir al desarrollo de las sociedades, acabarán desapareciendo". El ejecutivo ha vuelto a manifestar la importancia de crear una "constitución digital", que regule nuestros derechos en el mundo digital y que aborde el uso ético de tecnologías como la inteligencia artificial. Telefónica, ha explicado, trata de genera impactos positivos en todos los ámbitos donde está presente: genera un impacto en el PIB de los países donde opera de más de 53.000 millones de euros, un aporte de impuestos de más de 10.000 millones y aporta 1,2 millones de empleos, directos e indirectos. 

Compromiso con el accionista y gobierno corporativo

Además del reparto de dividendos de 40 céntimos por acción, Pallete también ha descrito ante los accionistas los avances en gobierno corporativo, como incrementar la independencia del Consejo de Administración, reducir el número de consejeros e incrementar la diversidad de éstos. 

Del miso modo, se ha comprometido a acercar más la empresa al accionista, incrementar las vías de comunicación con éstos y darles un tratamiento diferenciado a los que también sean clientes de la empresa. Este programa implica un seguimiento y atención personalizado. "Somos Telefónica, somos su compañía y volveremos a cumplir", ha concluido el presidente ejecutivo.