Mercedes-Benz ha comunicado que el próximo lunes suspenderá la producción de tres turnos en su planta de Vitoria-Gasteiz ante la incertidumbre provocada por los paros de los transportistas. La compañía ha trasladado su preocupación por la no garantía de un suministro de piezas que les permita continuar con la producción normal, situación que ya ha sucedido en semanas anteriores y que tienen miedo a que se alargue mucho en el tiempo.

Devenido de esta situación, la empresa no ha descartado la necesidad de tener que trabajar los sábados 9, 23 y 30 de abril en los sectores de montaje bruto, pintura y montaje final. Según ha informado la dirección de la empresa, esta reorganización del trabajo responde a la necesidad de “asegurar la posibilidad de recuperar la producción perdida y entregar el volumen comprometido (de vehículos) a los clientes".

Este paro se suma al que tuvo lugar el lunes anterior. La empresa ha tenido que parar en más de una ocasión durante el último mes, lo que puede suponer pérdidas económicas y consecuencias a corto plazo. Nuevamente habrá reajustes de turnos, como sucedió a lo largo de febrero. En marzo, la planta ha sufrido ya 4 jornadas sin ensamblar y un paro el pasado 21 de marzo. Este lunes la situación vuelve a repetirse, agravándose las pérdidas.

A pesar de la paralización de la producción del lunes, el martes la fábrica volverá a su actividad normal, si es posible, y durante la semana la producción se limitará a los tres turnos del martes, miércoles, jueves y viernes. A la espera de conocerse si finalmente habrá turnos durante el fin de semana, la empresa ha querido dejar claro su compromiso con los clientes, pero también su preocupación por la escasez de suministros.