"El plan de recapitalización [de Bankia] va a dejar al grupo en una magnífica situación financiera", asegura y añade que "desgraciadamente ello se hace a costa de fondos públicos" y causa un "grave perjuicio a los actuales accionistas".

El expresidente de Bankia, que sigue siendo presidente del Consejo de Administración de Caja Madrid, hizo públicas sus críticas el pasado miércoles, a través de un texto que él mismo repartió en mano al resto de consejeros. La reunión, que duró dos horas, no abordó, sin embargo, este asunto, sino que estuvo centrado en la conversión de Caja Madrid en una fundación.

En el texto también advierte de que la inyección de dinero público en Bankia va a "provocar unas consecuencias negativas para el resto del sector financiero, que van a tener unos porcentajes de cobertura muy inferiores".

"Este plan de capitalización es magnífico para Bankia y para su nuevo equipo gestor, pues lo que hace es provisionar o dotar las posibles pérdidas futuras derivadas de unas inversiones inmobiliarias excesivas realizadas en el pasado". destaca el documento, subrayando las palabras "futuras" y "pasado", subraya.

En relación a la modificación de las cuentas correspondientes a 2011, que se pasó de 300 millones de beneficios a 3.000 millones de pérdidas, justificó que es consecuencia de las provisiones adicionales.

Rodrigo Rato anunció su dimisión al frente de Bankia y de su matriz, Banco Financiero y de Ahorro (BFA), el pasado 7 de mayo, alegando que era lo “más conveniente para esta entidad", y propuso como su sustituto a actualmente al frente del grupo financiero.