El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, ha vuelto a reafirmarse en su postura contra la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) que debaten actualmente Gobierno, sindicatos y las propias patronales de empresarios. El líder de los empresarios españoles ha asegurado este jueves que subir el salario mínimo puede suponer una “importante contracción del empleo” en una entrevista para Capital Radio.
Garamendi aboga por la necesidad de negociar el SMI de forma territorial, y no general, alegando que el coste de la vida no es igual en todos los territorios. "Estamos hablando de una España diversa. El SMI unifica todo. Madrid y Barcelona tienen un coste de la vida que poco tiene que ver con el de otros territorios. Habría que evaluar un SMI que se acoplara a cada territorio, como hace la propia negociación colectiva", explica el presidente de los empresarios españoles.
Asimismo, ha recalcado que “con la que está cayendo”, no es el momento de subir el SMI, en línea con lo anunciado en los últimos meses. Según Garamendi, esto podría suponer para ciertos sectores “una traba muy importante” a la hora de recuperar el empleo perdido durante la pandemia de coronavirus.
Así, alega que la subida del SMI no afectaría a la gran mayoría de los sectores, con sus convenios particulares y un salario “muy por encima del SMI”, pero que sí lo haría en el sector del campo, un sector que “lo está pasando muy mal”. Una subida que también afectaría, asegura, a las “miles de familias” que cuentan con personal doméstico o personas contratadas para cuidar de sus mayores, alertando de un posible aumento de la economía sumergida.
El Gobierno no necesita el visto bueno de los agentes sociales
La postura de Garamendi y, por ende, de la patronal, es conocida desde hace meses y fue recalcada este miércoles, antes de la reunión con el Ministerio de Trabajo y los sindicatos. En declaraciones a Telecinco, el presidente de la patronal aseguraba: "¿A quién no le gustaría que los salarios suban? Yo soy el primero que digo que lo tendríamos que hacer. Pero pensamos que no es el momento porque venimos de un año y medio horrible".
Sin embargo, es importante destacar que las reuniones de Trabajo con los agentes sociales son puramente de debate y qué es el Ejecutivo quien tiene la última palabra, según consta en el Estatuto de los Trabajadores. Es decir, la posición en contra de la patronal a subir el SMI no frenaría, al menos en teoría, la intención de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, de aprobar esta subida y continuar con la senda pactada en el acuerdo de coalición.
De hecho, el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recalcaba este miércoles la voluntad del Gobierno de abordar una “subida inmediata” del SMI en lo que queda de año y continuar así con el compromiso electoral, que pasa por que el salario mínimo alcance al final de la legislatura el 60% del salario medio nacional.
15 euros más en lo que queda de año, según los sindicatos
Según la información desvelada por los sindicatos, la propuesta que el Gobierno ha presentado este miércoles en la mesa de diálogo social pasa por una subida de 15 euros para este año y 31 euros para 2022 y 2023. Sin embargo, el secretario de Estado, Joaquín Pérez Rey, cifraba la subida en una horquilla de entre 12 y 19 euros para este año, siguiendo las recomendaciones del informe de expertos independientes publicado el pasado mes de junio.
Ante esto, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se pronunciaba solo unas horas después de la reunión, asegurando que la decisión se tomará “rápidamente”. "Se va a implementar rápidamente. Voy convocar una mesa más y la decisión se va a tomar, por eso el presidente del Gobierno ha dicho que será inmediatamente", ha asegurado Díaz en una entrevista en Onda Cero.
"Sería bueno, si podemos, dibujar el final de la legislatura para dar certezas y seguridad para sectores y trabajadores" -ha pedido la titular de Trabajo- "Quienes se oponen a esta subida tendrán que explicar por qué dicen que no a un millón y medio de trabajadores que cobran el SMI y son los más vulnerables".
