Repsol ha cerrado el año con un resultado neto positivo de 4.251 millones de euros tras dispararse un 70% su beneficio a lo largo del ejercicio 2022, un año marcado por la incertidumbre, la volatilidad en el sector energético y "complejas dinámicas de mercado" tras el impacto de la guerra de Ucrania. Gracias al resultado positivo del último ejercicio, la multienergética ha anunciado una inversión orgánica récord en su historia para este 2023, por valor de más de 5.000 millones de euros. De los más de 4.200 millones de beneficio obtenidos en 2022, el 64% corresponde al negocio internacional, tal y como explica la compañía. 

La multienergética ha desplegado todas sus herramientas y activos para asegurar el suministro energético en España a lo largo del año, especialmente tras la invasión rusa de territorio ucraniano y los consiguientes cortes de gas ruso a Europa de Vladimir Putin. Así, Repsol ha destinado 2.000 millones de euros para aumentar los inventarios disponibles y garantizar el suministro como esfuerzo adicional ante la crisis energética que ha asolado Europa, en un contexto marcado por la tensión en los mercados internacionales. 

Además, la compañía fue la primera en sumarse al descuento a los carburantes anunciado por el Gobierno, ampliando la rebaja a la hora de repostar en sus estaciones de servicio hasta los 30 céntimos por litro para sus clientes. Una medida que mantiene todavía a día de hoy, tras finalizar la bonificación del Estado, y que se mantendrá durante los próximos meses hasta primavera, en concreto hasta el próximo 31 de marzo, cuando prevé una normalización de los precios de las materias primas. Para ello, Repsol ha destinado más de 500 millones de euros a lo largo de 2022.

Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol, ha puesto sobre la mesa el papel de la compañía en un momento crítico del sector energético: “Somos conscientes de nuestra labor como servicio esencial para la sociedad. Para nosotros, siempre es prioritario cumplir con esa responsabilidad, que emerge con más importancia, si cabe, en momentos complicados como los que hemos vivido en los últimos años. En 2022, nos esforzamos en garantizar el suministro, reducir el impacto de la crisis energética en nuestros clientes e invertir en el futuro industrial de España, a la vez que continuamos potenciando nuestro perfil como compañía multienergética y avanzando en la descarbonización”.

Infografía resultados Repsol 1

 

Repsol, la empresa del Ibex que más impuestos paga en España

La mejora del beneficio de Repsol en un 70% ha llevado también a la multienergética a realizar la mayor contribución fiscal de la historia del grupo a las arcas públicas: más de 17.000 millones de euros. El 70% del total de los impuestos pagados por Repsol, alrededor de 12.000 millones de euros, han ido directamente a la hacienda pública española, dejando a la compañía como la empresa del Ibex 35 que más impuestos paga en España. 

En esta línea, el consejero delegado de la compañía, Josu Jon Imaz, ha respondido a los "mensajes populistas" contra los beneficios de las grandes empresas. "Considerar extraordinario un beneficio que se obtiene de un gran esfuerzo inversor y penalizarlo frente al que se dedica a importar productos de otros continentes sin crear un solo empleo industrial, es, además de injusto, incomprensible y perjudicial para la economía española”, ha criticado Imaz en la presentación de resultados. 

Relacionado Imaz critica que considerar extraordinario el beneficio de Repsol es "injusto, incomprensible y perjudicial"

La compañía no solo ha tomado medidas para garantizar el suministro energético de la sociedad sino que, en paralelo, ha aprobado mejoras salariales y reconocimientos extraordinarios con sus trabajadores, en aras de mantener el poder adquisitivo ante el fuerte repunte de la inflación. El ejercicio 2022 ha cerrado para Repsol con un nuevo acuerdo marco con los sindicatos, con una revisión retroactiva de los salarios con efecto 1 de enero de 2021, y un aumento del 9,4% de la retribución media en España frente al año anterior. Así, los trabajadores de Repsol en España han visto aumentar su retribución un 5% entre 2020 y 2022. 

Según las cifras puramente económicas, comunicadas este jueves a primera hora a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Repsol invirtió 4.182 millones de euros a lo largo de 2022 para avanzar en su transformación hacia una multienergética, un 40% más que el año anterior, centrada especialmente en la Península Ibérica y en Estados Unidos. La compañía mantiene esta tónica de inversión y ha anunciado una inversión orgánica histórica de más de 5.000 millones de euros para este 2023. Del total, el 35% de las inversiones irán destinadas a su objetivo de ser cero emisiones netas, un límite marcado para 2050, y en concreto para proyectos bajos en carbono. 

Infografía resultados Repsol 2

Los dos últimos años no compensan las pérdidas del periodo 2019-2020

El modelo de negocio integrado y el Plan Estratégico 2021-2025 de la compañía han jugado un papel fundamental en el negocio de Repsol para lograr un desempeño positivo mientras, en paralelo, Repsol mantenía el foco en la seguridad de suministro energético y en su camino hacia convertirse en una compañía de cero emisiones netas en 2050. No obstante, la compañía asegura que el resultado positivo de 2022, sumado a los 2.499 millones de euros de 2021, no llega a compensar las pérdidas de 2019 y 2020, este último ejercicio marcado por la pandemia de coronavirus, con un resultado negativo conjunto de 7.105 millones de euros. El beneficio conjunto de Repsol en el periodo 2021-2022 asciende hasta los 6.750 millones de euros, todavía 350 millones por debajo de las pérdidas de los ejercicios anteriores.

La generación de caja ha permitido a Repsol la reducción de su deuda neta en un 61%. Además, la energética ha anunciado un aumento del 11% en la remuneración en efectivo para sus accionistas este 2023, hasta un dividendo de 0,70 euros por acción, tras llevar ya a cabo la amortización de 200 millones de acciones, lo que beneficia a más de 520.000 inversores, en cifras de la compañía, la mayoría de ellos minoritarios y localizados en España. Para 2023, Repsol ha anunciado un nuevo programa de recompra de acciones propias y una reducción de capital.

Los resultados anuales de Repsol y el aumento del dividendo a sus accionistas no parece convencer al mercado y la acción de la compañía cotiza en rojo en los primeros momentos de la sesión. Repsol arranca la sesión búrsatil de este jueves con caídas superiores al 2%, hasta alrededor de los 15 euros por acción, tras sufrir una fuerte caída en la apertura del Ibex, que le ha llevado de los 15,40 euros del cierre del miércoles a los 14,80 euros de esta mañana.

La guerra de Ucrania revuelve los mercados 

El estallido de la guerra de Ucrania y las consiguientes sanciones impuestas a Rusia por la Unión Europea tuvieron un impacto directo en los mercados energéticos del continente, muy dependientes de los hidrocarburos rusos, según reconoce la propia compañía en la presentación de sus resultados anuales. Los precios del gas y, posteriormente, del crudo, aumentaron de forma abrupta durante la primera mitad de 2022. Un encarecimiento que, según Repsol, fue creciendo según aumentaban las sanciones a Rusia. Tanto que el precio del crudo alcanzó máximos históricos, en los 140 dólares por barril, en niveles de 2008.

La segunda mitad del año continuó marcado por las consecuencias de la guerra de Ucrania. En este caso, el temor a una recesión económica global y la caída de la demanda cambiaron la tendencia del mercado y se produjo un desplome de precios, con cotizaciones del Brent por debajo de 80 dólares por barril en el mes de diciembre, tal y como explica la compañía en su presentación de resultados anuales.