La Agencia Tributaria está inmersa en una investigación fiscal a la empresa holandesa Ferrovial, con una filial todavía radicada en España tras su marcha a Países Bajos como matriz hace casi un año, en abril de 2023. Hacienda ha lanzado una inspección fiscal sobre la constructora de la familia de los del Pino para investigar el pago de los correspondientes impuestos en los últimos años a las arcas públicas españolas.

La propia compañía, con sede en Países Bajos, ha sido la que ha confirmado la inspección de Hacienda a su negocio en la memoria anual presentada en los últimos días. Ferrovial reconoce en su documentación oficial que Hacienda ha abierto una “inspección general tributaria” por el pago de varios impuestos, entre ellos el Impuesto de Sociedades entre 2017 y 2020; las retenciones fiscales de los ejercicios de 2019 y 2020 y por el pago del IVA en 2019 y 2020. Ferrovial reconoce también en su memoria anual que la investigación de Hacienda se llevará a cabo como un único procedimiento en el que la constructora ya está colaborando. De hecho, asegura que la documentación requerida por los técnicos de la Agencia Tributaria se está presentando en la actualidad para cumplir con el procedimiento.

"Se ha notificado el inicio de la inspección general tributaria para Ferrovial S.E. (sociedad sucesora de Ferrovial S.A) y sus filiales en junio de 2023, incluyendo los Impuestos sobre Sociedades ejercicio 2017-2020, retenciones del ejercicio 2019-2020 e IVA ejercicio 2019-2020. La comprobación e investigación se llevarán a cabo en un único procedimiento de inspección para el grupo fiscal. Actualmente se está presentando la documentación requerida", reza literalmente el documento presentado por Ferrovial en inglés.

Tal y como reconoce la propia empresa, Hacienda está investigando tanto a Ferrovial S.E. como matriz, la ya empresa holandesa tras el cambio de sede social en abril de 2023; como a sus filiales, entre ellas aquellas compañías que la familia del Pino ha dejado en España para mantener parte de su negocio en su país natal. Otro de los detalles que revela el documento es que la investigación de Hacienda a todas las empresas de Ferrovial arrancó en junio de 2023, apenas dos meses después de que los accionistas de la compañía dieran el visto bueno a la fuga de la compañía a Países Bajos.

Ferrovial todavía no ha cumplido su objetivo de llegar a Wall Street 

Un procedimiento que se explicó sobre el papel como una fusión transfronteriza entre Ferrovial como matriz principal del grupo y la compañía con la que ya operaba en Países Bajos. No obstante, en la práctica, la operación suponía llevarse la sede social de la compañía a Ámsterdam, desde el centro de Madrid. De hecho, la multinacional ha presentado sus resultados y ha celebrado sus últimas ruedas de prensa desde la ciudad holandesa, en inglés. La compañía explicó en todo momento que su intención de irse a Países Bajos era un paso previo para alcanzar su objetivo final: llegar a cotizar a Wall Street. Una meta que ha anunciado, y confirmado, para este primer trimestre de 2024.

A 13 de marzo, aún no se ha producido el estreno de la multinacional de los del Pino como una cotizada más de Wall Street, el centro bursátil mundial por excelencia, con la previsión de que ocurra en las próximas semanas. La holandesa ya ha pedido permiso para estrenarse en Nueva York a la SEC, el regulador bursátil estadounidense, en un informe en el que precisamente reconocía observar cierto “riesgo fiscal” por irse de España.

Ferrovial tenía que explicar, a la perfección, que los motivos para irse de España cumplían con un objetivo puramente de negocio y no atendían a razones fiscales. De ser así, podrían recibir una multa del Gobierno por entender que se trataría de un cambio para pagar menos impuestos, es decir, para pasar a funcionar bajo un marco fiscal más flexible que el español. La compañía ha negado en todo momento que su plan de huida tuviera motivaciones fiscales, con un argumentario muy claro centrado en llegar a Wall Street. No obstante, es la propia empresa holandesa la que reconoce ahora estar siendo investigada por Hacienda. Y es que si Hacienda encontrara una motivación fiscal de Ferrovial para irse de España podría imponer una multa que, indudablemente, tendría su impacto en las cuentas económicas de la ya empresa holandesa.

No solo España, también Canadá y Chile investigan a Ferrovial

La memoria anual de Ferrovial sobre su negocio de 2023 incluye también otra serie de investigaciones fiscales, más allá de la que está llevando a cabo la Agencia Tributaria nacional. Es el caso de inspecciones por parte del Gobierno de Canadá, donde las autoridades fiscales han iniciado también una auditoría por el pago del Impuesto de Sociedades en dicho país. También en Chile la holandesa está siendo objeto de investigación, con una inspección por su negocio de los últimos años.

Por otro lado, el informe anual de 2023 de la filial que Ferrovial dejó en España tras su marcha -con el hijo del todopoderoso Rafael del Pino al mando- revela que, a fecha 31 de diciembre de 2023, Ferrovial mantiene abierto un litigio fiscal con la Agencia Tributaria. En este caso, se trata literalmente de “litigios en curso derivados de las actas levantadas a raíz de inspecciones tributarias en España”, según la holandesa, con cifras concretas. Ferrovial reconoce que la cuota litigiosa que tendría que pagar de resultar sancionada -ya provisionada en sus cuentas anuales de 2023- asciende a 207 millones de euros, 332 millones de euros y 333 millones de euros correspondientes a los años 2023, 2022 y 2021, respectivamente. En total, Ferrovial tendría que pagar alrededor de 860 millones de euros por los litigios fiscales de los últimos tres años.