El Foro Económico Mundial de Davos reúne estos días a los grandes representantes políticos y socioeconómicos a nivel internacional, con una amplia representación española. A la presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, se suma la participación de los grandes líderes del Ibex como Ana Botín, presidenta de Banco Santander; Carlos Torres, presidente de BBVA; el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz; el consejero delegado de Cepsa, Maarten Wetselaar; el líder de Naturgy, Francisco Reynés; el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete; o el director de Innovación y Sostenibilidad de Iberdrola, Agustín Delgado, en ausencia del presidente de la eléctrica, Ignacio Sánchez Galán.

Todos ellos se han reunido este martes en un encuentro informal con el presidente del Gobierno en el que los grandes líderes empresariales han llevado sus reclamaciones. Desde la necesidad de la colaboración público-privada para avanzar en la recuperación económica por la que ha abogado Ana Botín, presidenta de Banco Santander, hasta los riesgos en materia energética que han puesto sobre la mesa los representantes de compañías como Repsol o Cepsa, pasando por una defensa por Europa frente a las grandes potencias mundiales o el despliegue de los fondos Next Generation UE.

Botín pide colaboración público-privada para avanzar en la recuperación económica

El discurso de Botín en Davos pasa por impulsar la colaboración público-privada entre instituciones y empresas para asegurar la recuperación económica. La presidenta de Banco Santander ha celebrado públicamente los “niveles de empleo más altos de la historia” en los países donde opera el banco, también en España, durante su participación en uno de los paneles celebrados el lunes. Así, aunque no descarta la posibilidad de una recesión mundial, la lideresa del Santander no ve preocupación por el empleo.

La presidenta de Banco Santander ha puesto sobre la mesa en Davos la “capacidad de resiliencia” de los consumidores. Asimismo, ha descartado los riesgos de una crisis del ladrillo similar a la de 2008. Y es que la riqueza neta de los consumidores se encuentra ahora en “niveles mucho más altos”, según Botín, a pesar de la subida de tipos por parte de los bancos centrales.

Según fuentes presentes en la reunión entre los grandes del Ibex y Pedro Sánchez, los líderes económicos y políticos españoles dejaron al margen el impuesto temporal a la banca aprobado por el Gobierno. No obstante, la presidenta del Banco Santander expresó sus quejas públicamente durante su intervención posterior. “La banca paga muchos impuestos” -denunciaba Botín, con una tasa superior al 30%- “Si los gobiernos necesitan aumentar los impuestos, los pagaremos. Pero, ¿por qué la banca debería pagar más que otras empresas?”. “Si el Gobierno necesita aumentar los impuestos, que se haga entre todos los sectores", reclamaba Botín.

Las energéticas alertan de volatilidad futura

La presidenta de Banco Santander no ha sido la única en hacer sus peticiones en el Foro de Davos. Las grandes energéticas han hecho lo propio con su sector. Por un lado, Josu Jon Imaz, CEO de Repsol, ha trasladado al presidente del Gobierno la necesidad de mantener la neutralidad tecnológica de Europa frente al resto de potencias mundiales, especialmente Estados Unidos. Imaz ha viajado a Davos con la idea de avanzar en una transición energética justa que permita a Europa mantener su nivel de competitividad.

También el CEO de Cepsa, Maarten Wetselaar, ha dejado patente, tanto públicamente como en la reunión informal con Sánchez, el riesgo de una mayor volatilidad en el precio de los carburantes. La mayor demanda de gas procedente de China y el panorama internacional son los ingredientes para una mayor volatilidad en los precios internacionales, ha alertado el consejero delegado de la compañía. Cepsa ha acudido a Davos con una apuesta clara por el hidrógeno verde que situaría a España, y la Península Ibérica, en pionera de esta apuesta renovable.

No solo los grandes representantes de la banca y el sector energético español han llevado sus peticiones a Davos. Otro de los grandes presentes en Davos es José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, que ha reclamado la necesidad de mejorar la formación continua de los trabajadores para mejorar sus capacidades digitales. La reclamación de Pallete va en la línea de informe de Davos que revela que en los próximos cinco años se tendrán que cubrir 20 millones de empleos nuevos, todos ellos relacionados con la digitalización y la innovación. "La tecnología es la raíz del problema y también la raíz de la solución. Tenemos que estar seguros de que quienes tienen trabajo lo mantendrán y de que quien no lo tiene, lo encontrará", ha reclamado el líder de la teleco española por excelencia en una de sus intervenciones.