José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, abandonará la presidencia de BFA, la matriz de Bankia, en el momento en que se formalice la fusión con CaixaBank, prevista para el próximo mes de marzo, según avanza El Periódico.

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De esta forma, pasará a presidir la entidad resultante y abandonará su trabajo para el Estado, ocho años después de ser elegido por Luis de Guindos para sustituir a Rodrigo Rato. El grupo tiene una estructura doble ya que, por encima de BFA, estaría el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), con una participación del 61,77% en Bankia.

Además de Goirigolzarri, también abandonarán el consejo de BFA los otros dos consejeros ejecutivos de Bankia. Por un lado, el consejero delegado, José Sevilla y, por otro, el director general de personas, medios y tecnología, Antonio Ortega. También dejará el órgano de administración el secretario no consejero Miguel Crespo.

El cambio se producirá en el momento en que se formalice la fusión con CaixaBank ya que dejaría de tener sentido mantener una presidencia en BFA con una filial que dejará de existir, explican en el medio citado. BFA se convertirá entonces en una sociedad anónima y dejará de estar supervisada por el Banco Central Europeo (BCE).

Por otro lado, el FROB tiene la intención de que FBA continúe siendo la sociedad que mantenga el 16% de la nueva CaixaBank, pero ya prevé un replanteamiento sobre cómo articular su gestión cuando se anuncie la desconsolidación al BCE.

BFA cuenta con otros dos miembros en su consejo que no forman parte del consejo de Bankia. Se trata de José Carlos Pla, expresidente de la ya extinguida Catalunya Caixa, y Paloma Sendín, ex alto cargo en los Ministerios de Industria y Economía. Precisamente estos dos nombres suenan como posible nuevo presidente de BFA tras la salida de Goirigolzarri, según El Periódico.