La energética pública italiana Enel ha presentado este lunes su nuevo plan estratégico para el periodo 2025-2027 en un Capital Markets Day celebrado en Roma para comunicar todos los detalles a inversores y analistas. La energética pública, matriz y dueña de la mayoría de las acciones de Endesa, ha confirmado su apuesta por España durante, al menos, dos años más por contar con un marco regulatorio que "apoya la inversión", tal y como explica en su nueva hoja de ruta remitida a primera hora de la mañana al mercado.
La eléctrica prevé destinar alrededor de 26.000 millones de euros a su negocio de redes en los dos próximos años, un 40% más respecto al plan estratégico anterior. Una cifra de la que alrededor del 78% irá destinado a su Italia natal -Enel es una empresa dependiente del Estado desde finales del siglo XX- y a España, donde cuenta con una de las grandes eléctricas en sus manos, Endesa. El gigante italiano se compromete así a destinar un amplio porcentaje de su inversión prevista en redes, una decisión que justifica por contar ambos países, también España, con marcos regulatorios "capaces de apoyar las inversiones". En cifras, la compañía destinará 4.000 millones de los 26.000 millones anunciados a Iberia, es decir, España y Portugal.
Y es que la compañía asegura que el negocio de las redes de distribución seguirá siendo facilitador de la transición energética, requiriendo mayores inversiones para poder materializar en la práctica la "creciente" capacidad renovable, así como para garantizar una mayor resiliencia ante eventos climáticos extremos, cada vez "más frecuentes y severos" y que, incluso, "se han convertido en la nueva normalidad" por los efectos del cambio climático. Ante esto, Enel mantiene que serán necesarios nuevos diseños de mercados eléctricos y marcos regulatorios adecuados para poder remunerar las inversiones y sostener el crecimiento, tanto en energías renovables como en redes.
Enel reitera su apuesta por España
Esta apuesta por el sector energético español, con la consiguiente justificación, refleja la confianza de un gigante del sector en el territorio nacional y concretamente en el marco regulatorio nacional. Todo ello en medio de las críticas y las amenazas de los gigantes energéticos de llevarse sus inversiones fuera de España en caso de que el impuesto extraordinario al sector, diseñado para 2023 y 2024, saliera adelante como permanente a partir del próximo 1 de enero de 2025. Esta posibilidad parece haberse disipado en el sector de la energía, tal y como quedó en la enmienda incluida por el PSOE en la transposición de la normativa europea sobre el impuesto a las multinacionales.
Sin embargo, las enmiendas siguen en plena negociación política, por lo que todavía no se puede confirmar oficialmente que las grandes energéticas españolas, entre ellas Endesa, dejen de estar gravadas de forma extraordinaria a partir del próximo 1 de enero. La confianza de Enel en el marco regulatorio español daría pistas, no obstante, de que finalmente las energéticas se quedarán fuera del impuesto, como no ha ocurrido con el gravamen extraordinario al sector bancario nacional, al menos por el momento.
Con esta apuesta por el sector energético español, Enel prevé aumentar su base de clientes de energía del mercado libre, tanto en Italia como en España, hasta alcanzar más de 19 millones de cara a 2027, el último año de ejecución de su plan estratégico. Su Italia natal y España son los dos mercados clave para Enel, al menos así lo demuestra en el nuevo diseño de su hoja de ruta para los próximos dos años. Y es que Endesa cada vez tiene más poder italiano tras el nombramiento de nuevos directivos dependientes del Gobierno de Giorgia Meloni en la última junta de accionistas de la eléctrica, en manos italianas desde hace años.
Apuesta por las renovables
En otro orden de cosas, Enel ha confirmado los pilares estratégicos de su hoja de ruta a futuro: rentabilidad, flexibilidad y resiliencia; eficiencia y eficacia y respetar los aspectos financiero y ambiental. La italiana asegura que su plan estratégico 2025-2027 arranca un nuevo capítulo de crecimiento sostenible y creación de valor a través de la solidez financiera registrada en sus cuentas en los últimos años. Así, en total ha anunciado inversiones por valor de 43.000 millones de euros, 7.000 millones más frente al plan anterior, de los que pretende destinar 4.000 millones a España y Portugal. Además, contempla una inversión de 12.000 millones de euros en energías renovables, de la que el 31% estará destinada a Iberia, es decir, España y Portugal. También en materia de renovables, la italiana prevé que los nuevos marcos regulatorios del Gobierno español respalden los planes de descarbonización de la italiana, dependiente del gobierno de Meloni.
“Las acciones de gestión llevadas a cabo durante el año pasado nos han permitido alcanzar todos los objetivos que anunciamos a los mercados y fortalecer la solidez financiera del Grupo. De este modo, podemos iniciar un nuevo capítulo de crecimiento que creará más valor para los accionistas y todos nuestros grupos de interés” -ha reiterado Flavio Cattaneo, consejero delegado de Enel- “Entre 2025 y 2027, nos centraremos en las actividades principales y en una asignación de capital flexible, aumentando las inversiones principalmente en activos regulados con rendimientos predecibles que también apoyarán la aceleración de la transición energética. Además, seguiremos mejorando la eficiencia y la rentabilidad, también a través de nuevas oportunidades de negocio. Esta estrategia nos permite revisar al alza la política de dividendos durante el período del plan con un dividendo mínimo fijo de 0,46 euros por acción que aumenta desde los 0,43 euros establecidos en el plan anterior y con un potencial alcista adicional de hasta un 70% de pago sobre el Resultado Ordinario Neto”.