Credit Suisse ha anunciado su intención de pedir 50.000 millones de francos suizos, 50.750 millones de euros al cambio, al Banco Nacional Suizo (BNS) tras el desplome bursátil del lunes, con una caída de más del 25%, y los problemas de liquidez a los que se enfrenta tras el anuncio del Banco Nacional Saudí, su principal accionista, de no inyectar más capital en el negocio del banco. La entidad suiza ha justificado esta reclamación al banco central nacional que asegura, realiza de forma preventiva, para aportar mayor liquidez al banco, con la que "respaldaría los negocios y a sus clientes principales". Es decir, 50.000 millones más para ayudar a la viabilidad del negocio.

El anuncio de la entidad suiza se ha producido esta madrugada después de que el propio Banco Nacional Suizo (BNS) y la Autoridad Supervisora Suiza de los Mercados Financieros (FINMA), el banco central y el regulador financiero del país, confirmaran que estaban dispuestos a rescatar a Credit Suisse tras los problemas de liquidez de los últimos años, con un matiz más que claro: "en caso de ser necesario". Apenas horas después, ya de madrugada, la entidad ha reconocido como necesaria la inyección de liquidez por 50.000 millones de francos suizos por parte de las autoridades suizas. 

Además de pedir esta inyección de liquidez, el banco ha comunicado públicamente el lanzamiento de una oferta de Credit Suisse International para recomprar títulos de deuda senior por hasta 3.000 millones de francos, 3.045 millones de euros al cambio como otra de las medidas para reforzar su viabilidad en un momento crítico. 

Las autoridades suizas reconocen que Credit Suisse cumple con los requerimientos

No obstante, las propias autoridades regulatorias suizas han reconocido que la entidad es estable y que cumple con los requerimientos de capital y liquidez, dando un mensaje de tranquilidad al resto del sector financiero europeo. "Los estrictos requisitos de capital y liquidez exigibles a las entidades financieras suizas aseguran su estabilidad. Credit Suisse cumple los requerimientos de capital y liquidez impuestos en los bancos de importancia sistémica", defendían el Banco Nacional Suizo y la FINMA en un comunicado conjunto. La supervisora de los mercados financieros suizos ha confirmado también estar en "contacto estrecho" con la entidad y ha defendido que el banco cumple con la regulación aplicable a la gran banca. 

Un mensaje de calma y tranquilidad que los bancos europeos, y españoles, han recibido con subidas en sus respectivos parqués. El Ibex ha arrancado la sesión de este jueves con avances de alrededor del 2% y todas sus cotizadas en verde, con Banco Santander y otras de las grandes cotizadas del sector entre las cinco mejores de la jornada. También el propio Credit Suisse ha arrancado la sesión con un fuerte rebote del 30%, recuperando gran parte del desplome sufrido en la jornada anterior que le llevó incluso a suspender su cotización de forma temporal en el parqué local. 

Los reguladores suizos han defendido también que la inestabilidad financiera fruto del colapso del Silicon Valley Bank (SVB), el Signature Bank o Silvergate no conlleva "un riesgo de contagio directo para las entidades suizas". Una idea que han reforzado también las autoridades, políticas y financieras, en todo el mundo. Desde el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hasta la vicepresidenta primera y máxima responsable económica del Gobierno, Nadia Calviño, o la presidenta de la Asociación Española de la Banca, Alejandra Kindelán, esta misma mañana. Esta última ha defendido el saneamiento de la banca española, el marco regulatorio diferente al de Estados Unidos y la mayor diversificación de negocio como aspectos clave para desmentir "rotundamente" cualquier efecto contagio tras las quiebras en Estados Unidos. 

El máximo accionista del banco critica que el pánico es "injustificado" 

Por su parte, el presidente del Banco Nacional Saudí, Ammar Al Khudairy, ha defendido en una entrevista en la CNBC norteamericana que el anuncio de no inyectar más capital es algo que ya se conocía y que el colapso de Credit Suisse responde al "pánico". "Desafortunadamente, mucha gente solo buscaba excusas" -ha criticado públicamente- "Es completamente injustificado, ya sea para Credit Suisse o para todo el mercado". El Banco Nacional Saudí es el mayor accionista de Credit Suisse Group, con una participación del 9,88% sobre el total de la entidad, una cifra que no pretende aumentar. Su líder ha reiterado también el opimismo sobre la ejecución de los planes de reestructuración de la entidad de forma pública en las últimas horas. "El mensaje no ha cambiado, es el mismo desde octubre", ha defendido. 

La presidenta de la Asociación Española de Banca, Alejandra Kindelán, también se ha pronunciado sobre la situación del Credit Suisse durante su intervención de esta mañana. "Sobre Credit Suisse llevamos meses oyendo informaciones. Es un banco que tenía sus dificultades y que se han puesto de manifiesto en los últimos días", ha explicado para desmentir el efecto contagio sobre los bancos españoles.