La dirección de Coca-Cola European Partners ha comunicado a los representantes de los trabajadores de la embotelladora situada en Málaga que cerrará la planta a finales de año. Perteneciente a la filial Rendelsur, cuenta con alrededor de 80 trabajadores en activo.

Según fuentes de la compañía, la actividad de la planta de Coca-Cola en Málaga, con dos líneas de embotellado, se trasladará al centro situado en Sevilla, con 11 líneas y capacidad para producir el 25% del volumen que la compañía vende en España a nivel anual. La planta de Sevilla es la más grande del grupo en Europa.

Por otro lado, informan que las negociaciones con los sindicatos comenzarán la próxima semana, con todas las opciones sobre la mesa, planteando también la opción de recolocar a los empleados afectados por esta medida.

"El compromiso de CCEP es buscar todas las opciones posibles para mantener el empleo en Andalucía y asegurar que mantenemos nuestra capacidad industrial en esta comunidad autónoma", asegura la empresa.   

A pesar del impacto económico que ha tenido la crisis del coronavirus a nivel nacional, la embotelladora asegura que la decisión no tiene que ver con esta circunstancia y lo justifica dentro de una estrategia de mejora de la eficiencia y de las economías de escala en la empresa. De hecho, alega que Andalucía es la única comunidad autónoma que cuenta con dos plantas de embotellado a nivel europeo.

Así, con la incorporación de las dos líneas de Málaga a la planta de Sevilla, con una producción de 130 millones de cajas anuales frente a los 20 millones de la primera, Coca-Cola pasará a tener siete instalaciones en España, situadas en A Coruña, Bilbao, Barcelona, Valencia, Tenerife, Sevilla y Valencia.