Montoro y su equipo presentando los presupuestos en el Congreso.., unos presupuestos bajo vigilancia, por las acusaciones de electoralistas. Foto EFE




El Gobierno, vía Montoro, ha entregado este martes los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2016 en el Congreso de los Diputados. Un gesto histórico, sin precedentes, y nada inocente. Porque resulta evidente que si el Gobierno ha convertido este agosto en mes 'laborable' es porque con ello inicia así la campaña electoral, después de haber visto las orejas al lobo tras el zarpazo que sufrió en las pasadas elecciones autonómicas. El matiz electoral aparece casi detrás de cada una de las líneas, de cada una de las partidas que recogen estos presupuestos.


Los colectivos que el PP ha tocado con su 'varita mágica'
Para ello miremos las partidas que resultan más beneficiadas. La que parece más burda, la referida a los funcionarios. Los populares han prometido la subida del 1% de sus salarios y devolverles la paga extra que les quitaron en su primer año de gobierno. Tras la bajada del 5% de los sueldos que impuso José Luis Rodríguez Zapatero en su último año, y que llegó acompañada con un periodo de 5 años de congelación, medida que cumplió escrupulosamente Rajoy, resulta interesante que sea justo ahora cuando en Moncloa y alrededores se acuerdan de este colectivo, ya que las elecciones están a la vuelta de la esquina y pueden suponer un número de votos interesante. ¿Qué ha pasado con los tres años anteriores de su legislatura?


Las pensiones también subirán. Un casi simbólico 0,25%, lo que significa que se dedicará un total de 118.941,7 millones de euros más en comparación con 2015. Las de jubilación son las que más gasto supondrán con 83.561,3 millones de euros. En realidad este sector de la población ya se vio “beneficiado” por una subida idéntica del 0,25% para el año en curso en los presupuestos anteriores. En realidad en este concepto, el Gobierno se limita a cumplir con el mínimo que él mismo se había impuesto por ley. Pero, en cualquier caso, es un dato que permitirá al PP en campaña presumir de 'haber subido' el salario de los pensionistas.

Menos dinero para el desempleo: ¿buena, o mala noticia?
La aportación en estos presupuestos al desempleo se ha visto disminuida. Para el año en curso, 2015, fueron destinados algo más de 25.000 millones de euros. Para 2016 el Gobierno propone dedicar unos 20.000 millones. Pero Montoro no dice que esta disminución sea un 'recorte'. Al contrario, el Gobierno viene a presentarla como una prueba de que baja el desempleo. Un dato que, los más críticos, contrastan con otro muy diferente: lo que está sucediendo es que está creciendo el número de personas que están cayendo en la bolsa de las personas que no perciben ninguna prestación por desempleo.

Cristóbal Montoro dando la medida de estos presupuestos, para 2016, en el Congreso. Foto EFE



Tampoco se ha olvidado el Gobierno de otra gran bolsa de votos: los jóvenes. En ese sentido, las becas y ayudas al estudio para 2016 supondrán 1.472,4 millones de euros. O lo que es lo mismo, una ligera subida respecto a los 1.470 millones que destinó el Ejecutivo Rajoy a esta partida en 2015. La novedad es que se transferirán 24 millones de euros a las comunidades autónomas para que las familias obtengan subvenciones para gastos de adaptación del material didáctico a los nuevos currículos establecidos por la LOMCE. Por tanto, no solo a los estudiantes, sino también a las familias o padres con menores de edad, el PP se intentará presentar con otro motivo por el que pedirles su voto.

Pero más a allá de estos colectivos, si estos presupuestos se pueden calificar de 'electoralistas' es porque hacen una apuesta, completamente novedosa para este Gobierno, de una apuesta por partidas sociales. Y es que también en sanidad, educación, justicia, o seguridad ciudadana en estos presupuestos se destina una mayor cantidad de dinero de la que nunca antes había destinado este ejecutivo.