Margarita Delgado, subgobernadora del Banco de España, ha tranquilizado sobre la problemática de la vivienda descartando señales de alarma en el mercado inmobiliario español y resaltando la necesidad de desarrollar productos financieros que permitan movilizar el ahorro invertido en la vivienda "de una manera eficaz y transparente", poniendo como ejemplo la hipoteca inversa.

Durante su intervención en la jornada '40 Años del Mercado Hipotecario: retos y tendencias del sector', organizada por Sociedad de Tasación, la subgobernadora ha repasado la evolución del sector inmobiliario español, que tras la pandemia del Covid-19 se expandió con fuerza, una tendencia que se prolongó hasta los primeros meses de 2022, previos al estallido de la guerra de Ucrania y la crisis económica.

Delgado ha cotejado que el fuerte repunte de la demanda de viviendas, unido a la escasez de oferta, se ha traducido en un aumento del precio de los inmuebles, si bien la información más reciente muestra signos de menor dinamismo de la actividad inmobiliaria y de desaceleración de los precios, debido al agotamiento de los factores expansivos asociados a la pandemia y al nuevo contexto macrofinanciero adverso, caracterizado por el aumento de los tipos de interés, la pérdida de renta real de las familias por la inflación y el deterioro de la confianza y de las perspectivas económicas.

"En la medida en que persistan o se acentúen estos factores adversos sobre la demanda de vivienda, cabría esperar que se prolongue o que se intensifique la pérdida de dinamismo de la actividad y los precios en el mercado inmobiliario", ha señalado. En cualquier caso, Delgado ha asegurado que los precios de la vivienda han crecido a un ritmo más reducido que en otros países del entorno, "sin que se hayan observado desequilibrios significativos en este mercado en términos de precios y cantidades".

"Aunque los indicadores de valoración muestran que los precios se sitúan, en promedio, por encima de los niveles de equilibrio de largo plazo, la brecha entre ambos es moderada, al tiempo que el endeudamiento de los hogares está contenido y los estándares de concesión de crédito no se han relajado durante los últimos años", ha señalado.

En suma, la subgobernadora ha resaltado que el mercado hipotecario español se encuentra en una buena situación, con un marco normativo que garantiza su dinamismo y solidez, mientras que el mercado inmobiliario no muestra en España las "señales de alarma" que se han visto en otros países del entorno.

"A pesar de su marcada actividad en los últimos tiempos, no se detectan de momento desequilibrios generales que nos preocupen. Además, los estándares de crédito de las hipotecas parece que no se han relajado, lo que nos posiciona en una situación más sólida ante posibles deterioros de las variables macro", ha valorado.

La subgobernadora ha aprovechado para hacer hincapié en algunos de los retos pendientes del mercado inmobiliario e hipotecario, como son aumentar la educación financiera de la población, mejorar la información estadística sobre e mercado inmobiliario, regenerar el parque de viviendas y aumentar la eficiencia y el ahorro energético de las viviendas.

Asimismo, ha apuntado a la necesidad de desarrollar productos financieros que permitan movilizar el ahorro materializado en vivienda "de una manera eficaz y transparente". "En el pasado los intentos de implantar productos como la hipoteca inversa tuvieron poco éxito; bien por errores en la comercialización o porque coincidieron con el inicio de la crisis de 2008", ha explicado.