Los hogares españoles ahorraron un 2,5% del PIB hasta el tercer trimestre de 2020 por el impacto de la pandemia. Así lo ha desvelado el Banco de España este miércoles, que recalca que se trata de un ahorro "forzoso”. El organismo también cifra un ahorro acumulado del 2,5% para la zona euro.
El Banco de España explica este ahorro “forzoso” desde la irrupción de la pandemia en marzo de 2020 por las restricciones a actividades como el ocio o la cultura. Las familias no han podido alcanzar el nivel de consumo deseado por estas restricciones, según el organismo, con el fin de frenar la curva de contagios y el miedo al contagio.
"Esto ha generado un importante volumen de ahorro, que podría calificarse como de carácter forzoso", explica el organismo. Hasta septiembre de 2020, tanto el ahorro a nivel nacional como en la zona euro aumentó en 3,5 puntos del PIB en comparación con el mismo periodo de los últimos cinco años. Además, matiza que una parte importante del exceso de ahorro aparece en forma de depósitos bancarios.
Según el organismo, la evolución del ahorro refleja la caída del consumo de los hogares, mucho más acusada que en el caso de las rentas, ya que estas se mantuvieron por las ayudas públicas para mitigar el impacto económico de la crisis del coronavirus.
Aumento del ahorro ante la incertidumbre
Además de menos ingresos en los hogares, el Banco de España explica que también ha influido en el retroceso del consumo privado el deseo de los hogares de aumentar el ahorro con previsiones al futuro, ante la incertidumbre del futuro, así como las restricciones a la movilidad y las actividades adoptadas por las autoridades.
De cara al futuro, Banco de España prevé que parte de este ahorro acumulado durante la pandemia se libere en los próximos meses, en paralelo al avance del proceso de vacunación contra el coronavirus, la relajación gradual de las restricciones y la disminución “progresiva” de la incertidumbre por la crisis sanitaria y económica.
Esta liberación del ahorro permitiría también “un mayor vigor a la recuperación del consumo”, aunque el organismo alerta todavía de una “elevada incertidumbre”. Incluso anticipa que los consumidores podrían mantener un nivel de ahorro “relativamente elevado” ante posibles subidas de impuestos por el aumento de la deuda pública durante la crisis.
El Banco de España alerta de que la crisis del coronavirus podría modificar estructuralmente el patrón de comportamiento de los individuos, “más propensos a ahorrar en la medida en que pasen a asignar una mayor probabilidad a este tipo de eventos extremos".
Por otro lado, recalca que este ahorro se concentra principalmente en las rentas más altas, con una propensión al consumo menor. "Los hogares con las rentas más bajas no solo tienen una menor capacidad de ahorro, sino que el aumento de este durante los últimos trimestres también podría haber sido más limitado o, incluso, en algunos casos, haber sido inexistente, a pesar de que las medidas de apoyo público han contribuido a preservar sus ingresos", explican desde el organismo.
