Gobierno, sindicatos y patronal siguen manteniendo reuniones para alcanzar un acuerdo sobre la prórroga de los ERTEs hasta el 30 de septiembre. Tras la reunión fallida del miércoles, el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, ha anunciado que el Ministerio de Trabajo está dispuesto a ampliar las rebajas de cotizaciones a las empresas afectadas por un ERTE en caso de nuevos rebrotes de coronavirus.

Esta propuesta es un nuevo intento para que las patronales CEOE y Cepyme firmen el acuerdo para ampliar los ERTEs con Gobierno y sindicatos y se pueda aprobar en el Consejo de Ministros extraordinario que se celebrará este viernes. Además, incluye el mantenimiento de los ERTEs de fuerza mayor total para aquellas empresas que no han vuelto a la actividad por el impacto de la pandemia.

La exención en las cotizaciones empresariales permanecerá para las empresas que aún se encuentran en ERTE de fuerza mayor total. Para empresas con menos de 50 trabajadores, las exenciones serán del 70% en julio, del 60% en agosto y del 35% en septiembre. Para empresas grandes, con más de 50 trabajadores, la exoneración será del 50% en julio, del 40% en agosto y del 25% en septiembre.

Sin embargo, los porcentajes son menores que los establecidos anteriormente, que suponían una exención del 100% para empresas con menos de 50 trabajadores y del 75% para aquellas con más de 50 trabajadores.

Exoneraciones para las empresas que tengan que volver a cerrar

La segunda nueva propuesta plantea la posibilidad de que las empresas que ya han vuelto a la actividad y tengan que volver a cerrar por un rebrote puedan acogerse de nuevo a un ERTE de fuerza mayor, con exoneración de cuotas del 80% para las empresas con menos de 50 trabajadores y del 70% si tiene más de esta cifra de empleados.

Las exoneraciones no cambiarían para los ERTEs de fuerza mayor parcial y por causas objetivas. Es decir, las empresas de menos de 50 trabajadores alcanzarían el 60% por los trabajadores que volvieran a la actividad y el 35% por los que siguieran en el ERTE, mientras que para las de más de 50 trabajadores serían del 40% por cada trabajador que se reincorporara a su puesto y del 25% por el que siguiera en el ERTE.

Por otro lado, el Gobierno prohíbe a las empresas acogidas a un ERTE la realización de horas extraordinarias, el establecimiento o reanudación de la externalización de la actividad y la realización de nuevos contratos. Como excepción, solo podrán contratar o externalizar tareas si los trabajadores habituales no pueden hacerlo por formación, capacitación y “otras razones objetivas o justificadas”.