El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este sábado que durante las próximas dos semanas y, aprovechado el marco de la Semana Santa, todos los trabajadores de actividades no esenciales, deberán quedarse en casa.
Siguiendo la recomendación de los expertos, Sánchez busca así lograr la reducción de la movilidad que se alcanza los fines de semana.
Ante este anuncia, el Comité de Empresa de Alcoa, ha señalado que "es imposible realizar una parada programa de producción para el lunes 30 sin causar daño irreparable e inservible para las instalaciones, ya que técnicamente el sistema electrolítico es continuo y una parada en estas condiciones supondría un escenario que no contemplamos".
Por otra parte, han señalado que "nuestro sector productivo se desarrolla en una zona de muy bajo índice de contagios, nulo hasta el momento dentro de nuestras plantas y en las que se han tomado medidas que exceden estrictamente establecidas por el Gobierno durante el estado de alarma".
