La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha acusado este viernes a Rusia de cometer "crímenes de guerra" en Ucrania con "matanzas" como la perpetrada en la ciudad de Bucha y espera que esos actos sean juzgados por tribunales internacionales.

En declaraciones en Antena 3, Robles ha condenado la "crueldad del ejército ruso", que cree que se incrementará aún más durante las próximas semanas en la zona del Donbás, donde Rusia va a concentrar sus esfuerzos.

"Bucha parece la punta del iceberg porque las matanzas están siendo terribles, se trata de crímenes de guerra que espero que tengan respuesta desde el punto de vista penal", ha sostenido rechazando las palabras del embajador ruso en España, que tildó de "montaje" lo sucedido en esta ciudad.

Robles cree que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ya "ha perdido" una parte de la guerra al no ser posible su intención inicial de una ofensiva "rápida y quirúrgica" que le permitiera implantar un Gobierno "títere" en Ucrania. Y ahora, ha explicado, los rusos concentrarán su esfuerzo en el este de Ucrania, donde "la crueldad se va a incrementar mucho más".

Con ello, ha afirmado que la OTAN ya plantea un escenario en el que la guerra sea "larga" y "cruel", con consecuencias económicas "importantes"; aunque ha puesto su esperanza en que los "escasos" ámbitos de diálogo que siguen abiertos puedan prosperar. "Pero no somos optimistas", ha reconocido apuntando que la unidad internacional ha sido una importante de la derrota de Putin.

En este contexto, ha abogado por plantearse la dependencia energética respecto a Rusia que tiene la Unión Europea, sobre todo algunos países como Alemania. "Nos exige a todos valorar las circunstancias, hay un enorme dependencia energética -ha expuesto- En 2014 tras la invasión de Crimea todos miramos para otro lado y ahora hemos visto que es imprescidible que haya unas medidas porque esa dependencia energética le da una enorme potencia".

En un contexto geopolítico que "ha cambiado", con el crecimiento económico también de China, ha insistido en que la Unión Europea debe contar con autonómica estratégica, sobre todo desde el punto de vista energético, si quiere "tener protagonismo y liderazgo" y no quedar relegada "un agente menor".

Expulsiones por Seguridad Nacional

Además, ha revelado que la decisión de expulsar de España a 27 diplomáticos rusos se adoptó por razones de "seguridad nacional", aunque ha eludido concretar qué aspectos concretos de la seguridad nacional estaban en riesgo.

En cuanto a las empresas a las que el presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, acusó de seguir operando en Rusia, ha asegurado que el Gobierno se ha puesto en contacto con ellas para conocer la situación. En concreto, sobre Maxam, ha apuntado que sus filiales españolas "no tienen ningún trato" con Rusia ni sus trabajadores allí son españoles.