El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha lanzado este sábado en Sao Paulo su precandidatura a las elecciones presidenciales del próximo 2 de octubre, donde se verá las caras con el actual mandatario, Jair Bolsonaro.

Lula da Silva regresa así a primera línea política, más de una década después de dejar el poder, con la misión de derrotar a la propuesta de Bolsonaro a sabiendas de la ventaja que le conceden las actuales encuestas, y lo hace con un mensaje en el que destaca la necesidad de "restaurar la soberanía nacional" y "recuperar el papel internacional de Brasil".

En un sondeo de Genial/Quaest publicado en febrero, el expresidente brasileño aventajaba ampliamente en intención de voto a Bolsonaro por un 45 por ciento en primera vuelta frente al 23 por ciento del actual mandatario. En una hipotética segunda vuelta, el expresidente Lula vencería en todos los escenarios posibles, con un 54 por ciento en el caso de que Bolsonaro fuera su rival.

Criticas a Bolsonaro

En su anuncio, realizado en Sao Paulo y recogido por los medios brasileños Da Silva ha declarado que su intención es la de poner fin a la "política irresponsable y criminal" de Bolsonaro, cuya "sumisión a los negacionistas" durante la pandemia, entre otras políticas, "ha relegado a Brasil como paria del mundo".

"Nunca un gobierno como el que hemos tenido hasta ahora ha promovido tanto la intolerancia, la discriminación y la violencia", ha condenado en la parte de su mensaje dedicado a las mujeres y los grupos discriminados por su orientación sexual".

"Todo lo que hemos conseguido está siendo destruido por el Gobierno actual", ha denunciado, al tiempo que ha acusado a Bolsonaro de "arrebatar la soberanía energética" del país con su intención de privatizar la petrolera estatal Petrobras.

Del mismo modo, el exmandatario ha dedicado una parte de su intervención a la protección medioambiental de la Amazonia y de la población indígena.