Nueva noche de fiesta en Barcelona en este primer fin de semana completo sin toque de queda. Según han informado fuentes municipales, entre las 22.00 horas de este sábado y las 6.00 del domingo, la Guardia Urbana de Barcelona, en actuaciones conjuntas con los Mossos d'Esquadra, ha desalojado a 9.055 personas por formar aglomeraciones en espacios públicos.

La playa de Sant Miquel ha sido "el punto de máxima concentración". De allí se ha echado a 2.000 personas, a las que se ha redireccionado hacia el paseo Joan de Borbó por el lado del mar para evitar que accedieran de nuevo a las calles de la Barceloneta y evitar ruidos vecinales.

El paseo del Born y el de Lluís Companys han sido otros dos espacios de concentración masiva de personas que incumplían las medidas de seguridad, que "han sido desalojados sin incidentes".

Los agentes también han inspeccionado y cerrado tres locales por incumplir el horario de apertura, permitido hasta las 23.00 horas.