El pasado miércoles, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, visitó El Vaticano en busca de una solución para que los restos del dictador Francisco Franco no acaben finalmente en la Almudena. 

Como era fácil prever, la reunión no sentó muy bien entre los sectores más conservadores del país, que no dudaron en utilizar todos los medios disponibles para descalificar tanto a la vicepresidenta como el encuentro mismo. Sin embargo, a las críticas lícitas se le sumó también  un par de comentarios machistas sobre la vestimenta de Calvo, en concreto de su escote. 

En el programa de Carlos Herrera, de la cadena Cope, se refirieron al canalillo de Calvo como "el Valle de las caídas". Hay que matizar que el comentario original no provino del programa, sino de un tuit. Sin embargo, Santiago González, uno de los tertulianos del espacio, creyó conveniente leer este mensaje. Tras su lectura, el resto de tertulianos, Salvador Sostres, Joaquín Leguina, Antonio San José y el propio Herrara se rieron a carcajadas. 

El periodista español Máximo Pradera no dudó en denunciar estas palabras y afirmar que casi echa "de menos a Federico Losantos". La crítica no tardó mucho en hacerse viral.

De la radio al papel

Sin embargo, el comentario machista de González no se quedó solo en el programa radiofónico, sino que también llegó al papel. En concreto, el contertulio escribió una columna en el periódico El Mundo en el que volvió a incidir en el tema: "Carmen Calvo se entrevistó con Parolin luciendo canalillo y encajes". 

Ante estas palabras, fueron muchos los que volvieron a replicar y criticar a González. Entre ellos, hubo, incluso, alguna voz procedente del mismo medio, como la de Lucía Méndez, uno de los rostros más visibles de El Mundo.