El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ligó su futuro político al desarrollo de los acontecimientos en Cataluña este primero de octubre. "No habrá ningún referéndum”, dijo con solemnidad el líder del Partido Popular el pasado 28 de julio cuando una vez finalizado el Consejo de Ministros, hizo balance del curso político.

No es la única ocasión en la que Rajoy negó con rotundidad que este domingo habría urnas en Cataluña. “Con toda tranquilidad y con toda moderación, hay que decir que no habrá referéndum el día 1 de octubre”, afirmó el presidente del Gobierno el 3 de agosto, durante su paseo por las orillas del río Umia, en Galicia.

Palabra similares emitió el presidente del Gobierno tras el Consejo de Ministros extraordinario convocado el 7 de septiembre de este año para recurrir la ley de referéndum del Parlament. Entonces, el dirigente del PP insistió en que la consulta prevista para este 1 de octubre no iba a tener lugar: “La consulta no se va a celebrar en ningún caso”.

El desafío al Gobierno de España

“Votaremos”, dicen desde el Govern, convencidos de que los deseos de Mariano Rajoy de impedir el referéndum se verán truncados. Por ahora, la policía catalana no ha llevado a cabo ningún desalojo ni ha requisado material relacionado con la votación, como urnas, papeletas o listas de censo, en el interior de colegios, institutos y otros puntos para votar.

Los Mossos d'Esquadra se han personado hasta este sábado en 1.300 colegios que han sido designados como centros de votación para el referendo ilegal, de los que sólo 163 estaban ocupados por personas que han organizado actividades para evitar que la policía impida su uso el 1-O, como ha ordenado un juez, informa EFE.

Cabe recordar que el Govern ha previsto 2.315 colegios y 6.249 mesas electorales en toda Cataluña así como un dispositivo de 7.235 personas para intentar que este domingo 5.343.358 catalanes puedan votar en el referéndum sobre la independencia de Cataluña, pese a la suspensión decretada por el Tribunal Constitucional (TC).

Este tribunal ha ordenado a los Mossos que impidan la apertura de los centros que tienen previsto acoger la votación del 1-O.