El aumento de contagios en Valladolid y Salamanca ha obligado a la Junta de Castilla y León a tomar medidas extraordinarias. El gobierno regional decreta, desde el jueves, el retroceso de estos dos municipios a fase 1, con las restricciones correspondientes a la citada etapa de la desescalada. Este dictamen autonómico no ha caído de buen grado en el Ayuntamiento vallisoletano, cuyo alcalde, Óscar Puente, ha anunciado que recurrirá la orden de la Junta.

En los últimos días, Valladolid y Salamanca se han convertido en las ciudades más afectadas por la ola de rebrotes de coronavirus en Castilla y León. Este incremento de casos ha llevado al gobierno autonómico a decretar, desde las 00:00 horas de este 3 de septiembre y durante una semana, el retroceso de sendos municipios a la fase 1 de la desescalada.

Esta situación se revisará en el plazo de una semana, aunque el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, no ha encajado de buen grado el retroceso de su ciudad, junto con Salamanca, a la fase 1. Por este motivo, el Ayuntamiento anunció el martes que recurrirá el decreto de la Junta de Castilla y León ante los tribunales.

considerar que hay una "falta de justificación" para su adopción, pero además son "incoherentes" con otras actividades permitidas y perjudican a personas y empresas contratadas para eventos que se tienen previsto celebrar los próximos días.

El Consistorio, a través de un comunicado, afirma que no ha sido consultado en momento alguno del proceso, ha insistido en la seguridad de los eventos programados y ha anunciado el recurso ante los tribunales ante estas medidas que afectan a derechos fundamentales.

"No hay riesgo en las actividades programadas por el Ayuntamiento de Valladolid porque en todos los casos se limita el aforo, se establece una amplia distancia de seguridad y se controlan los accesos para evitar el contacto, como se ha comprobado en la reciente celebración del Festival Internacional de Teatro y Artes de Calle", ha apuntado el Consistorio.

¿Qué se puede hacer en fase 1?

El retroceso de Valladolid y Salamanca a fase 1 de la desescalada implica las mismas restricciones a las que ya estuvo sometido el país en la salida de la primera oleada del virus. Por ejemplo, se restringe el número de personas en las reuniones hasta los diez integrantes, las terrazas de bares y restaurantes podrán abrir al 50%. En los hoteles no se podrá hacer uso de las zonas comunes.

Se permite la apertura de comercios de hasta 400 metros cuadrados que no estén en un centro comercial, al 30% de aforo. Los comercios más grandes pueden acotar su superficie para adaptarse a ese límite. También administraciones de loterías estatales, y las rebajas y promociones.

Abren los concesionarios y las ITV

Los concesionarios de automoción, las estaciones de ITV y los centros de jardinería y viveros de plantas también pueden abrir, sea cual sea su tamaño, pero con cita previa.

Los ayuntamientos decidirán la apertura de mercadillos, con un máximo del 25% de puestos habituales.

Los centros educativos podrán abrir para desinfección y limpieza y para tareas administrativas. Se permiten congresos, eventos y seminarios de I+D+i de hasta 30 asistentes.

Bibliotecas, museos y cines

Las bibliotecas abren, pero no para actividades, solo para préstamos y lectura donde no se pueda llevar a domicilio. En el caso de los museos, abren con un tercio del aforo y sin actividades, solo visitas.

Se reanudan los rodajes de películas y series, y las salas de conciertos, teatros y cines pueden abrir a un tercio del aforo y, si el local es cerrado, con un máximo de 30 personas; si es abierto, de 200.

Se permiten los velatorios de hasta 15 personas al aire libre o 10 en espacios cerrados.

Terapias para personas con discapacidad

Está autorizado el acceso a terapia, rehabilitación, atención temprana y atención diurna para personas con discapacidad y/o en situación de dependencia. Su apertura dependerá de las comunidades autónomas.

Se podrá disfrutar de las instalaciones deportivas descubiertas (sin techo ni paredes) al aire libre, excepto piscinas y otras zonas de agua, de forma individual y en parejas en deportes que permitan distancia como el tenis. Abren los centros de alto rendimiento y, en ligas profesionales, se podrán hacer entrenamientos de diez personas pero sin contacto.

Actividades de turismo activo y naturaleza, pero solo si las organizan las empresas registradas para este fin. Se permiten la caza y pesca deportiva.