A pesar de que repetía que estaba a disposición de su partido, era un secreto a voces cuando se anunció. Reyes Maroto iba a ser la candidata del PSOE al Ayuntamiento de Madrid. La plaza madrileña, que se resiste a los socialistas desde hace décadas contaba con un nuevo candidato con los ojos vistos en construir una candidatura sólida, de largo recorrido y con un grupo municipal que no fuera a quedar desnortado con paracaidistas que abandonaron la política al poco de echar andar la legislatura como ocurrió con Pepu Hernández, candidato en 2019.

Tras cinco años en el ministerio deja tras de sí una notable gestión para la que el presidente del Gobierno ha tenido palabras de agradecimiento. "La pandemia supuso un gran reto. Su esfuerzo ha servido para mejorar en competitividad y alcanzar niveles prepandemia, pese al reto de la guerra de Ucrania", indicaba Pedro Sánchez en las escalinatas del Palacio de la Moncloa en las que ha anunciado que su relevo será el exdirector de Turespaña y exportavoz socialista en el Congreso, Héctor Gómez. "La ministra Maroto ha trabajado para encontrar soluciones. Debemos reforzar nuestra autonomía estratégica para proveer en situaciones de emergencia, reducir nuestra dependencia y digitalizar nuestra economía para hacerlo más competitiva", añadía al respecto el líder del Ejecutivo señalando leyes trabajadas y aprobadas por su departamento como la ley de Industria o el PERTE del vehículo eléctrico, el naval o el de descarbonización. "Son ejemplo de la magnífica labor de la ministra Maroto. Quiero, además, agradecerle que haya estado al frente en los peores momentos. Todo el mundo destaca su talante y capacidad de diálogo", comentaba.

En su equipo celebran el relevo de Gómez, del que destacan su capacidad. "Se verá con Héctor", avisan sobre el que fuera miembro del ministerio de Maroto y nuevo ministro de Industria. Ahora, con su salida casi tramitada, los esfuerzos pasan por intensificar su labor de campaña. Maroto ha compaginado desde noviembre su labor al frente de Industria con una precampaña tachada de "insuficiente" en sus propias filas. De hecho, hasta enero no comenzó a realizar acciones como candidata mientras que a izquierda y derecha del PSOE los actos se han venido sucediendo desde hace meses. "Vamos a intensificar el trabajo en la calle, en los barrios, hablando con comerciantes y asociaciones", indican desde su equipo.

Fuentes de la dirección nacional del PSOE ponen sus esperanzas en Madrid. "Viendo el cartel electoral de Almeida está todo dicho. Es viable ganar y lograr un pacto en la izquierda", señala un miembro destacado de Ferraz, que creen que le puede perjudicar también que de Madrid solo se hable para atacar. "Madrid solo exporta crispación", insisten vaticinando buenos resultados para la izquierda en otros importantes ayuntamientos de España.

Misma actitud tienen en el PSOE de Madrid. "Los españoles pierden una gran ministra pero los madrileños ganarán a la mejor alcaldesa posible", indican destacando que la todavía ministra "ha levantado el turismo y la industria de España tras una pandemia histórica y desde que dio el paso de ser candidata ha redoblado su empeño para compaginar la gestión de un ministerio fundamental con su compromiso con la ciudad de Madrid". Por ello, dicen, su salida hará que los madrileños conozcan todavía más sus propuestas y "dar aire fresco a Madrid tras los cuatro años de oscuridad, contaminación y ruido de Almeida".

Campaña sin actos grandes

Una actitud que no es bien vista por todos en el PSOE de Madrid. "Hay que dejar de hacer hincapié en que es ministra y de destacar su capacidad de gestión. Ya lo conocemos. Es una política madrileña, que conoce la ciudad y que empezó aquí", comentan fuentes próximas a la dirección del PSOE madrileño. "Da la imagen de que el PSOE no tiene un proyecto para Madrid y Reyes Maroto no transmite las políticas que queremos desarrollar en la ciudad. Tiene buenas ideas, pero no hay continuidad ni apoyo del partido en Madrid. No pasamos de las declaraciones de la candidata en Madrid, ni siquiera la estructura del partido en Madrid ayuda a que esas ideas no se queden en unas declaraciones de la candidata", añaden.

Sin embargo, Maroto se alejará del aparato del partido y buscará hacer una campaña pegada a la calle. "La campaña va a tener dos puntos. Por un lado presentar a los madrileños su campaña de gestión y por otro darles confianza en Maroto. Va a ser una campaña a pie de calle, con pequeños actos. Vamos a huir de las campañas tradicionales de grandes actos y mítines", indican en su equipo. "El ir a los barrios y a lo pequeño hace que sus propuestas no tengan una continuidad. El PSOE tiene una estructura fuerte y ella no se apoya en él", critican en sus filas insistiendo en que Maroto "tiene que buscar la complementariedad".

Sin embargo, en su equipo consideran que la mejor opción es acercarse a los ciudadanos, a los que consideran "desapegados de la política" por la gestión del alcalde de la ciudad. "Las expectativas son buenas", insisten tanto en su equipo como en la dirección del partido en Madrid como en la militancia. "La izquierda no vive sus mejores momentos, pero la mala gestión de Almeida posibilita un cambio de signo político en el Ayuntamiento en mayo", indican.