Las Cortes de Castilla y León han conseguido aprobar la Proposición No de Ley del PSOE para que la Junta ponga en marcha actividades que garanticen la conciliación de las familias ante la reducción de cuatro horas de la jornada escolar durante los meses de junio y septiembre de 2021 y junio de 2022.

La iniciativa ha conseguido salir adelante gracias al apoyo de la procuradora no adscrita María Montero -que dejó Ciudadanos tras la fallida moción de censura de los socialistas- ya que tanto Partido Popular como Ciudadanos han votado en contra. El Grupo Mixto sí la ha apoyado.

El procurador socialista Fernando Pablos, portavoz de Educación, ha sido el encargado de defender la Proposición, y ha criticado que la Junta haya decidido reducir la jornada lectiva en septiembre, además de en junio como venía ocurriendo, sin consultar ni a las asociaciones de padres y madres ni a los sindicatos educativos.

También ha acusado al Gobierno autonómico de despreciar a la comunidad educativa que “ha sido marginada en la elaboración del calendario escolar”. “La implantación de la jornada reducida sin incorporar medidas de conciliación genera problemas a muchas familias”, ha remarcado.

Con esta iniciativa se pretende que se planteen programas de conciliación durante estos meses y que se mantengan las bonificaciones que ya existen en la actualidad para el programa Madrugadores.

Desde las bancadas del Gobierno no han dudado en denunciar esta iniciativa y culpar al PSOE de un “intento de cambio demagógico para hacer suyas las opciones de conciliación”. Inmaculada Gómez, de Ciudadanos, ha espetado que la Junta impulsa muchas medidas en materia de conciliación que contemplan “diferentes realidades”, mientras que la popular María del Carmen Sánchez ha afeado a los socialistas su operación de “disfraz” y que lleve a las Cortes esta solicitud a solo cinco días de que arranque esta reducción de jornada con un debate “baldío y propagandístico”.