Un nuevo contrato sin concurso público, sin proyecto y, en definitiva, a dedo, llama la atención en el Ayuntamiento de Madrid, presidido por el popular José Luis Martínez-Almeida. En pleno agosto y sin concurso público es como el alcalde Madrid ha nombrado al nuevo director de Matadero Madrid, dirección que estaba desierta desde que dimitió la anterior dirigente, Rosa Ferré. Con esta nueva operación, el alcalde continúa por el camino de seguir dando la espalda a la independencia de criterio en los puestos de programación cultural del Ayuntamiento de Madrid.

La persona que Martínez-Almeida ha nombrado para este cargo de dirección artística de Matadero es José Luis Ramos Romo, que fue asesor de la anterior delegada de Cultura del ayuntamiento, Andrea Levy, para posteriormente asumir la Dirección General de programas y actividades culturales del Ayuntamiento, que coordinaba una amiga personal de Levy, María Ballesteros, que fue cesada.

Este nombramiento ha aparecido publicado en el portal de contrataciones con total agosticidad y sin publicar ninguna noticia. En lo que se puede intuir de la motivación que publica el anuncio destaca que José Luis Romas Romo era la única persona que tiene las facultades y derechos necesarios para el cargo, lo que radica en un importante agravio comparativo con el resto de profesionales de la cultura que podrían asumir esas funciones. Además, teniendo en cuenta que Romo no propone ningún proyecto artístico y no se valora por ningún jurado.

En concreto, en el portal de contratación se puede leer la motivación que lleva a este contrato de esta forma: “La elección del adjudicatario se ha valorado, partiendo de su reconocida trayectoria profesional, su carácter único y las cualidades que hacen que con su conceptualización y modo de llevarla a cabo se pueda alcanzar el resultado artístico deseado. Siendo la única persona que tiene las facultades y derechos necesarios para la realización de la misma”.

Denuncia y críticas desde Más Madrid

Este nuevo contrato a dedo en el Ayuntamiento de Madrid ha provocado la repulsa de Más Madrid, formación líder de la oposición. “Desde Más Madrid seguimos denunciando que Almeida utilice recursos públicos sin concurrencia pública como modelo cultural, dando la espalda a la demanda histórica del sector de la cultura para que haya concursos públicos para este tipo de puestos”, denuncia en declaraciones a ElPlural.com Edu Rubiño, portavoz adjunto de la formación, añadiendo que estos cargos de dirección artística “toman decisiones importantes sobre la contratación artística y programación cultural en la ciudad”.

“Precisamente cuando son más necesarias que nunca la concurrencia e independencia de estos cargos, cuando estamos viviendo tiempos en los que la injerencia política sobre las decisiones culturales está tomando la forma de censura en muchos ayuntamientos españoles”, subraya Rubiño, en clara referencia a la censura de obras y piezas culturales en diferentes consistorios gobernados por la derecha y la ultraderecha. Es en este sentido en el que explica que ya en el ayuntamiento madrileño se ha ejercido la censura con un documental, concretamente el que lleva por título ‘Madrid Destino Cultura Turismo y Negocio, S. A.’, porque “no era de su agrado”.

Sobre la censura en el Ayuntamiento de Madrid

Edu Rubiño, además de criticar este nombramiento a dedo, también ha sido especialmente contundente con el modus operandi de los consistorios de la derecha y extrema derecha para censurar las obras y piezas audiovisuales que no le gustan o interesan. “¿Quién es el Partido Popular, el alcalde Martínez-Almeida, para cargarse de la cartelera de Cineteca Matadero una obra que habla de la precariedad de los trabajadores de Madrid Destino?”, se pregunta el portavoz adjunto de Más Madrid, explicando a su vez que “no es la primera vez que lo hace, ya ocurrió hace un año y medio con la misma obra”.

“Desde luego, censurar o retirar obras que no son del agrado de los partidos de la derecha son actuaciones impropias de una democracia y contrarias a todas las proclamas de libertad que tanto cacarean. Quienes critican la supuesta ‘cultura de la cancelación’ o señalan como ofendidos a quienes no comulgan con su estrecha moral son los primeros en tirar de tijeras y mordazas cuando no se les da la razón”, remarca.

Es así como Rubiño también se adentra en el fichaje de Marta Rivera de La Cruz, delegada de Cultura, Turismo y Deportes, que fue uno de los fichajes estrella de Alberto Núñez Feijóo, su número 2 al Congreso de los Diputados por Madrid: “Tenemos en el Ayuntamiento de Madrid una responsable de Cultura, Marta Rivera de la Cruz, que ya desde la Comunidad de Madrid se dedicó a fomentar esa censura cultural, prohibiendo la obra de Paco Bezerra que trataba sobre la vida de Santa Teresa de Jesús y que Vox consideraba ofensiva”.

“Almeida no tiene el más mínimo derecho a censurar documentales, ni obras de teatro ni expresiones artísticas porque no le gusten; la cultura es libertad, la cultura es una cuestión de profundas raíces democráticas donde prime la pluralidad. Nosotros, desde Más Madrid, no vamos a consentirlo”, remata Edu Rubiño.