La concejala de Vox en el municipio murciano de Alhama, Carolina Martínez, ha asegurado en un pleno que "la libertad de cátedra es para los catedráticos, evidentemente", defendiendo con este argumento su defensa al pin parental. Pero su argumento es falso, ya que es un derecho fundamental que afecta a todos los docentes y está recogido en el artículo 20 de la Constitución, definiendose así:

"La libertad de cátedra es un derecho fundamental, afecta a todos los docentes y expresa su derecho a "difundir libremente pensamientos, ideas y opiniones". A pesar de que su mayor expresión es en la enseñanza universitaria, es un derecho de cualquier profesor, sea catedrático o no". Por otra parte, en palabras del Tribunal Constitucional en una sentencia de 1992 se define como: "Una proyección de la libertad ideológica y del derecho a difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones de los docentes en el ejercicio de su función".

En el pleno en el que Carolina Martínez defendió el pin parental con ese argumento falso, se aprobó la propuesta de la concejala de Educación, María José López (PSOE), para retirar las instrucciones sobre el pin parental recibidas a principio de curso por parte de la Consejería de Educación de la Región.

Allí, la concejala de Vox también aseguró: "En todo caso, aunque habláramos de los profesores, el pin parental no les afecta a los profesores porque estamos hablando de charlas que no imparten los profesores, sino personas que vienen de fuera del claustro". Este veto implica que los padres sean los que autoricen o no a sus hijos para asistir a talleres y charlas en temáticas como la violencia de género o los colectivos LGTBI. Y fue una medida implantada en Murcia como una de las condiciones de Vox para dar su apoyo a la investidura del Gobierno de coalición entre PP y Ciudadanos.