Este sábado un menor de 17 años violaba a otra menor de 14 frente al centro de acogida de menores no acompañados de Hortaleza. Tras el suceso, la oleada de racismo acrecentada en los últimos días en manos de la extrema derecha del país seguía su marcha, cargando duramente contra la población inmigrante y vinculando la llegada de extranjeros con un aumento de la criminalidad.
Como consecuencia de ello, en la noche de este domingo un grupo de encapuchados se ha concentrado frente a las puertas del centro de acogida con el objetivo de asaltar y propinar una paliza a un grupo de menores migrantes internos en el centro, tal y como ha adelantado el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, durante la rueda de prensa en la que ha ofrecido el balance de criminalidad del primer semestre del año.
Los hechos se produjeron cerca de las 22:00 horas de la noche de este domingo provocando fuertes golpes en los menores agredidos y uno de ellos ha tenido que ser trasladado al hospital para recibir la atención que precisa. Según ha informado el delegado del Gobierno en la mañana de este lunes, desde la delegación del Gobierno van a trabajar “para reducir estos buenos datos que les he señalado”, en referencia a la disminución de la criminalidad en los primeros seis meses del año. “La ciudadanía puede contar con todo el compromiso de esta delegación del Gobierno de España, de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para continuar avanzando en esta línea, pero es importante exigir responsabilidad a todos los actores políticos de nuestra región”, ha sostenido.
En líneas similares, Martín ha proseguido destacando la importancia de aunar esfuerzos entre todos los actores sociales para aumentar la seguridad de la ciudadanía. “No cabe propagar el miedo ni cabe inocular el odio, entre todos desde la responsabilidad podemos procurar el que la ciudadanía sea consciente de las condiciones de seguridad que rigen en nuestra región y también de los retos y desafíos que tenemos por delante para continuar avanzando y además, si lo hacemos desde esa responsabilidad, podremos sin duda lograr los objetivos con mayor eficacia”, ha defendido.
Cada delito nos preocupa y nos impulsa a seguir trabajando para mejorar, como ya demuestran los datos de seguridad en la Comunidad de Madrid.
— Fran Martín Aguirre (@franmartagui) September 1, 2025
Pero la seguridad se construye entre todos: pido responsabilidad a los actores políticos y rechazo cualquier intento de sembrar miedo u… pic.twitter.com/s8gKYVtYJF
Derecha y extrema derecha intensifican su odio
Al margen de todo ello, y pese a que el autor de la violación ya ha sido detenido, tras conocerse el suceso desde la extrema derecha y la derecha han incrementado su odio hacia la población inmigrante.
El primero en hacerlo fue el líder de Vox, Santiago Abascal. A través de su cuenta de X (antes Twitter) vinculó la violación a la menor de 14 años con el buque de ayuda humanitaria Open Arms. El líder de la extrema derecha sostuvo que la menor violada es "víctima de Sánchez, de Open Arms, del bipartidismo". "¡Una niña! Una niña víctima de Sánchez, de Open Arms, del bipartidismo, de todos los que hacen política y negocio con la invasión islamista", señaló.
Lo hizo, además, días después de apuntar que el buque de la ONG había que “confiscarlo” y “hundirlo”. A través de otro mensaje en esta red social, se refirió a la tripulación de este barco como “negreros” y llevaba a cabo una petición muy clara: “Hay que confiscarlo y hundirlo (…) para que sirva de advertencia de cuál va a ser el final que les espera a todos los multimillonarios y políticos que promuevan la invasión de Europa”.
Algo que levantaba de forma paralela una cascada de reacciones. Entre ellas, la del propio fundador de Open Arms, Óscar Camps, quien se mostraba muy claro con la postura de Abascal: “Decir que hay que hundir un barco que salva vidas es fascismo puro”. Con esas palabras, Camps puso de relieve la paradoja que encierra el discurso de Vox: señalar como enemigos a quienes evitan tragedias y convierten en números los cadáveres que el mar devuelve a las costas.
Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha pronunciado también sobre la violación vinculándola de manera directa a la llegada de población inmigrante. “Cada día son menores más agresivos y llegan en peores condiciones. Y la respuesta del gobierno de Sánchez es multiplicar su llegada y desatenderse de ellos mientras nos insultan a los presidentes. A lo que se suman los cientos de miles de adultos que llegan por Bajaras cada año y los campamentos de Sánchez en Madrid. ¡No hay derecho! ¡Ya está bien!”, defendía.