La situación por la que atraviesa el río Lérez en Pontevedra ha provocado que se enciendan todas las alarmas. Hace unos días el Ayuntamiento de la capital de las Rías Baixas puso en marcha una campaña para concienciar acerca de la necesidad de un consumo racional del agua. Entre otras medidas se optó por el cierre de fuentes ornamentales y de agua potable, aunque las altas temperaturas han obligado al concello a dar marcha atrás por razones de salud pública.

Hoy mismo la Xunta de Galicia ha activado la situación de prealerta “por la escasez moderada de agua en los sistemas del río Lérez”, tal y como han explicado. La decisión se ha adoptado en el maro de la reunión de la Oficina Técnica da Seca, que se ha celebrado este jueves vía telemática con la participación del director de Augas de Galicia, Roi Fernández, el gerente del organismo hidráulico, Gonzalo Mosqueira, representantes de Protección Civil, MeteoGalicia y de las Consellerías de Sanidade y Medio Rural, además de otros responsables autonómicos.

Han insistido desde la Oficina que “no se advierte una situación de sequía prolongada” en ninguna de las demarcaciones geográficas de la costa gallega. Las excepciones a esto se dan en el río Lérez y la ría de Pontevedra y el río Grande, ya en la provincia de A Coruña, donde sí este organismo sí ha tomado medidas.

La declaración de prealerta se adopta, en el caso del caudal del Lérez por situarse por debajo de lo que se marca como mínimo, y porque las previsiones meteorológicas apuntan a que este episodio de calor y sequedad continuará durante las próximas semanas. La situación de pre alerta supone un seguimiento intensivo de todos los aspectos que pueden influir de forma directa e indirecta en las demarcaciones a las que afecta, además de la petición de concienciación y sensibilización por parte de la ciudadanía en cuanto al consumo se refiere.

En el caso concreto de Pontevedra, este miércoles el concejal de Servizos Urbanos Básicos, Xaquín Moreda, habló de este asunto y volvió a mostrar su preocupación por la “crítica” situación por la que atraviesa el río Lérez.

No hay que olvidar que de él se abastecen diferentes municipios, de ahí que también haya aprovechado para hacer una llamada de atención a aquellos ayuntamientos donde el consumo de agua se ha disparado, no ya por ser verano, sino comparándolo con el mismo período de años anteriores.

Que Ence deje de captar agua

El caudal del Lérez se sitúa en las últimas horas en su momento álgido en los 1,49 metros cúbicos por segundo, es decir, por debajo del fijado como nivel ecológico en 1,516 metros cúbicos por segundo.

En situaciones como esta, además de una llamada a los concellos que se abastecen del río Lérez, el ayuntamiento pontevedrés tiene claro que hay una empresa que debería parar en su consumo: Ence la planta de celulosa que tiene en plena ría.

Sobre esto, el concejal de la capital no dudó a la hora de reclamar a la Xunta de Galicia que intervenga para que la factoría deje de tomar agua del río y se priorice el consumo humano.

Cabe recordar que hace justo tres años, en julio de 2022, también el cosistorio de las Rías Baixas, ante otro episodio de prealerta por sequía reclamó el cese de la captación de agua por parte de la fábrica de celulosa, ya que, según denunciaron entonces, consume hasta el triple de agua que los municipios.

Ahora, en esta línea, han vuelto a insistir en que esta actividad industrial es incompatible con el nivel que acumula el caudal del río Lérez.

Por su parte, la propia empresa ha respondido a esto y tras informar de que su consumo de agua es mucho menor por los nuevos sistemas de fabricación de la pasta de celulosa, se ha mostrado partidaria de para esas captaciones, tal y como ya sucedió en años anteriores.