El transcurso de varios días desde que se produjo la muerte de Samuel Luiz por los golpes recibidos por parte de un grupo de jóvenes no ha calmado los ánimos y ayer mismo volvieron a producirse actos de protesta contra la LGTBIfobia.

Hasta el momento, tres de los detenidos se encuentran ya en prisión, mientras que los dos últimos arrestados, que todavía no han alcanzado la mayoría de edad, han sido trasladados a un centro de menores. 

Hoy, el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, durante la visita que ha realizado a Vigo centrada en materia económica, ha vuelto a opinar sobre este asunto a preguntas de los periodistas.

Según dijo, "se va a seguir trabajando" con el objetivo de establecer si hay más implicados en la paliza que acabo con la vida del joven coruñés. No obstante, tras esto añadió que confía en que la investigación se cierre "en breve", apuntando al carácter “clave” que van a tener las pruebas testificales.

No hay que olvidar que las pesquisas siguen abiertas y bajo secreto de sumario, señalando Miñones que "se sigue con el visionado de las cámaras" y la toma de declaraciones a testigos.

Precisamente, el secreto de sumario en la que se halla el proceso por parte de la autoridad judicial llevó esta mañana al delegado a no “entrar en detalle” porque, como indicó, el no ofrecer más datos "es clave que la investigación se cierre bien". En este sentido, en el instante en el que está la investigación, José Miñones no descartó que “se produzcan nuevas detenciones".

Una de las novedades que se han publicado en los últimos días apunta a la participación de uno de los jóvenes que ya ha ingresado en prisión en otra reyerta al día siguiente del asesinato de Samuel. Sobre esto, respondió a los periodistas que "todas las vías están abiertas", insistiendo en que el objetivo último es "poner (a los responsables de la muerte de Samuel Luiz) ante la Justicia".

En este sentido, no descartó que pueda haber más implicados, al margen de los detenidos la semana pasada, todos varones excepto una mujer joven a la que el juez dejó en libertad, pero con la obligación de comparecencias en sede judicial.