Los cambios, decididos en la tarde ayer en el marco de la reunión del Comité que asesora a la Xunta, han sido anunciados hoy por el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña. Las restricciones que hasta ahora estaban activas tras tomarse en diciembre y, que luego se prorrogaron, decaen. La noticia se han dado a conocer un día en el que se ha registrado un importante repunte de nuevos casos (7.005) aunque los activos bajan a 65.800 gracias a las altas (casi 1.500) en las últimas 24 horas.

En realidad, lo dicho este miércoles por García Comesaña, muy criticado en las últimas horas por la gestión del sistema de atención primaria, ya fue adelantado ayer por el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo.

Lo primero y más importante de lo señalado por el máximo dirigente de la Xunta de Galicia lo ha ratificado este mediodía el titular de Sanidade: fin del toque de queda. Además, dos de los sectores más castigados durante la pandemia, es decir, hostelería y ocio nocturno, recuperan la libertad horaria y, en el caso de restaurantes y bares, vuelve a permitirse el consumo en barra.

Otra de las medidas destacadas es la petición que elevarán en la próxima reunión sectorial de Sanidad con el Gobierno central y el resto de Comunidades Autónomas en relación con el tiempo de aislamiento tras un positivo. El responsable gallego ha adelantado que la Xunta aboga por una reducción de la cuarentena de siete a cinco días, y así se lo trasladará en el citado encuentro al resto de participantes. Eso sí, como el propio García Comesaña ha añadido, siempre teniendo en cuenta las evidencias científicas.

Estos cambios son posibles, tal y como ha indicado la directora xeral de Sáude Pública, Carmen Durán, porque ahora mismo la tendencia es de estabilización, o como ella misma ha definido “estamos en fase de meseta”. No obstante, todavía hay indicadores que preocupan, como la incidencia acumulada en los menores de 11 años. En este grupo de población es “muy alta”, mientras que se contiene entre los adultos. Por áreas sanitarias, la más afectada es Vigo, un patrón que se ha repetido en muchas etapas de la pandemia.

El Comité de expertos ha decidido que también se levanten las medidas restrictivas en conciertos y espectáculos; eso sí, el público asistente que podrá disfrutar de nuevo de ellos de pie, pero siempre con la mascarilla puesta en todo momento.

Una de las grandes novedades que introdujo el Gobierno gallego de cara a la Navidad fue lo que denominó el ‘toque de non queda’. Hoy, Julio García Comesaña ha anunciado su eliminación, o lo que es lo mismo, en la práctica se terminan los vetos a las reuniones de no convivientes durante la madrugada.

De cara a los carnavales, el conselleiro ha indicado tras recomendar “prudencia” los aforos serán del 100% aunque con la obligatoriedad de presentar el certificado covid en lugares interiores en los que se congreguen más de 200 personas, cantidad que sube hasta las 500 si la fiesta o el evento es en el exterior. En ambos casos queda prohibido fumar tabaco o cigarrillos electrónicos.

A modo de curiosidad, el pico de la sexta ola lo sitúa la Consellería de Sanidade en el 14 de enero, cumpliendo así las previsiones que apuntaban a esa fecha como consecuencia de la relajación navideña, confirmando la directora de Saúde Pública que el 97% de los casos activos que se dan en Galicia corresponden a la variante ómicron.