Junts per Catalunya ha extendido su ruptura con el Partido Socialista llegando por primera vez a la política local catalana, aunque en un contexto en el que la afectación de la separación será poca, pero en el que revela una división interna. La militancia del partido de Carles Puigdemont en la ciudad de Sabadell ha decidido este martes romper con el Gobierno municipal del PSC tras una ajustada votación de las bases en la que se ha impuesto con un 54,39% de los votos poner fin a la relación con la alcaldesa socialista Marta Farrés, quien gobierna con mayoría absoluta. Sin embargo, los dos concejales con los que cuenta la formación independentista en el Ayuntamiento, Lluís Matas y Katia Botta, se han mostrado contrarios a ejecutar esta ruptura y han declarado que necesitan tiempo “para reflexionar”. 

La votación presencial se ha llevado a cabo en el Casal Pere Quart de Sabadell, donde 31 militantes han votado a favor de la ruptura y 26 en contra. Resultados que demuestran que se ha encontrado lejos de ser una decisión unánime, más bien todo lo contrario. Por esta razón, los concejales de Junts no han dejado claro si obedecerán las órdenes del partido, que ha remarcado que esta consulta interna es “vinculante” y, por lo tanto, “debe ser acatado”. Tanto Matas como Botta dejan abierta la posibilidad de separarse de los posconvergentes para continuar con su labor en el Ayuntamiento como regidores no adscritos. 

Los dos concejales de Junts están en desacuerdo de la deriva del partido y a favor de seguir en el Ayuntamiento 

Ambos concejales de Junts per Sabadell (la variante municipal) se han expresado con anterioridad en desacuerdo con la “deriva” del partido de Puigdemont y remarcando que su prioridad es hacer política en la ciudad catalana. En este sentido, Matas y Botta subieron hace unos días un vídeo a redes sociales en el que reivindican que ya se han ejecutado un 75% de las medidas acordadas con el Ayuntamiento y los logros del municipio durante lo que va de legislatura como haber conseguido las mejores cifras de ocupación en 18 años. Asimismo, defienden los futuros proyectos pactados con el Consistorio, entre ellos un museo textil, el campus de la Vida y la Salud y el primer Plan Director de los Polígonos de Actividad Económica

La historia de Junts dentro del Gobierno municipal de Marta Farrés inició en octubre de 2023, cuando la alcaldesa llegó a un pacto con los posconvergentes en pro de la política municipal, debido a que el PSC cuenta con mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Sabadell con 14 de los 27 concejales. Tras un año y medio bastante tranquilo, el pasado verano dieron un ultimátum al Consistorio para renegociar el acuerdo. 

Además, el pasado mes de julio, Junts per Sabadell realizó una primera votación interna en la que participaron 45 militantes, de los cuales 36 votaron a favor de romper con el Ayuntamiento; 8 en contra, entre los cuales se encontraban los dos concejales; y uno se abstuvo. Un resultado sin duda diferente del de la nueva consulta, en la que casi la mitad de las bases ha apoyado el pacto con el PSC. 

La primera ruptura municipal tras romper con Sánchez

La ruptura de Junts con el PSC en el Ayuntamiento de Sabadell es la primera que los posconvergentes llevan a cabo en un municipio catalán después de que Puigdemont anunciase a finales del mes de octubre desde la localidad francesa de Perpiñán su intención de romper con el Gobierno de Pedro Sánchez, una decisión refrendada por la militancia del partido independentista con el 86,98% de los votos. Pero, como se ha comprobado en la consulta municipal, el amplio apoyo de las bases a la separación en término nacional puede que cueste más de conseguir en términos municipales.

Igualmente, la semana pasada la portavoz de Junts per Catalunya en el Congreso de los Diputados, Míriam Nogueras, anunció la decisión de la formación posconvergente de presentar una enmienda a la totalidad a prácticamente todas las leyes presentadas por el Ejecutivo nacional y su intención de rechazar cualquier futura propuesta del PSOE en la Cámara Baja. Entre las, como mínimo, 25 normas que pretentender tumbar los de Puigdemont se encuentran la Ley de la Universalidad del Sistema Nacional de Salud, la Ley de inclusión social de las personas con discapacidad o la Ley de restablecimiento de la Comisión Nacional de la Energía