El presidente de la Generalitat, Artur Mas, recibirá el 11 de septiembre a los organizadores de la cadena humana que la Assemblea Nacional Catalana (ANC) ha convocado con motivo de la Diada y con la que aspira a cruzar Cataluña de norte a sur durante más de 400 kilómetros. En rueda de prensa tras el Consell Executiu, el consejero de la Presidencia y portavoz del Govern, Francesc Homs, ha explicado que Mas sí recibirá a una delegación de la ANC para mostrarle que el Ejecutivo observa "con sentido positivo" la iniciativa.


Mas prevé recibir a una delegación de los organizadores en el Palau de la Generalitat el mismo 11 de septiembre a mediodía, antes de la cadena, que pasará también por la plaza Sant Jaume de Barcelona, justo frente a la sede del Govern.

Responsabilidad institucional
"El presidente, atendiendo a su rol institucional, los recibirá para expresar la valoración positiva que hace el Govern", ha explicado Homs, que ha remarcado que el protagonismo de la Diada debe ser para la ciudadanía, mientras que las instituciones deben actuar en consecuencia. "Es muy importante que todo el mundo sepa bien cuál es su papel", ha argumentado el consejero, que ha ensalzado el espíritu positivo de la iniciativa y está convencido de que la iniciativa será un éxito y tendrá una gran participación.

Libertad para los consejeros
El Consell Executiu ha acordado también actuar como en la manifestación de la Diada de 2012 favorable a un Estado propio para Cataluña, dando libertad de acción a los consejeros para que acudan a la cadena si quieren. Homs -que, como el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, ha evitado en la rueda de prensa precisar si asistirá- ha subrayado que el Govern hace "una valoración positiva" de la iniciativa, y ha deseado que haya una gran participación.

Sólo una baja confirmada
Hasta ahora, el consejero de Cultura, Ferran Mascarell, ya ha mostrado su "predisposición" a acudir a la cita, mientras que la vicepresidenta, Joana Ortega (UDC), opinó que los que vayan deberían hacerlo a título personal, no como miembros del Gobierno catalán. Por ahora, la única baja confirmada es la del consejero de Interior, Ramon Espadaler, que argumentó que no participará porque debe coordinar el dispositivo de seguridad de la Diada, mientras que el consejero de Salud, Boi Ruiz, explicó que su presencia será "anímica" si finalmente no pudiera acudir por sus responsabilidades en el departamento.