Junts ha tensado la cuerda esta mañana al proponer a dos miembros ajenos al Govern para su delegación en la Mesa de Diálogo con el Gobierno de España. El president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha tumbado los nombramientos de los postconvergentes, pero no se ha limitado a rechazar la proposición, sino que ha dejado fuera al partido de Carles Puigdemont.

Las aguas bajaban tranquilas después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, respondiera a la exigencia del Govern de sentarse en el primer encuentro de la mesa bilateral. Sin embargo, JxCAT ha desatado una crisis institucional al desmarcarse del acuerdo con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y proponer a tres personas ajenas al Ejecutivo catalán para completar la delegación independentista. 

La formación de Puigdemont ha buscado presionar a sus socios de gobierno con las proposiciones de Jordi Sánchez, Jordi Turull y Miriam Nogueras. Ninguno de los tres forma parte de la coalición, sino que, o bien ocupan posiciones orgánicas en el partido o ostentan la portavocía del grupo parlamentario en el Congreso, como es el caso de Nogueras. 

Aragonés ha aceptado el pulso y se ha plantado: no habrá ningún representante de Junts en la Mesa de Diálogo. El president de la Generalitat, que ha comparecido ante los medios alrededor de las 13:30, ha advertido que no piensa perder "una oportunidad histórica" ante el temor de que sus socios dinamiten la cita con el Gobierno central. 

La delegación tiene que ser de Govern, porque es la forma de representar al país entero. La puerta está abierta

Asimismo, Aragonès ha exigido lealtad a la formación de Puigdemont y encauzar una negociación que necesita de "nuevas complicidades" y "unidad". El president de la Generalitat ha exigido a los postconvergentes que abandonen las "motivaciones personales" y partidistas. Por el momento, tan sólo figuran representantes de Esquerra Republicana en la delegación catalana.

No obstante, no ha querido cerrar la puerta al completo y ha condicionado la presencia del partido de Puigdemont a que se ciñan a lo acordado. "La delegación tiene que ser de Govern, porque es la forma de representar al país entero. La puerta está abierta", ha precisado el president. 

La lista de la discordia

Junts ha resquebrajado la tranquilidad que envolvía a la Mesa de Diálogo tras la confirmar el presidente del Gobierno,  e su partido en la Mesa de diálogo con el Gobierno central. La dirección de la formación nacionalista ha propuesto a Jordi Sànchez y a Jordi Turull, además de al vicepresident de la Generalitat, Jordi Puigneró, y a la portavoz de Junts en el Congreso, Miriam Nogueras.

El partido de Carles Puigdemont ha anunciado su propuesta a través de un comunicado emitido este mismo martes, a una jornada del encuentro. Junts había advertido que no haría pública su lista hasta que el presidente del Gobierno no confirmara su presencia en el encuentro bilateral, algo que ocurrió en la noche del lunes. Los postconvergentes incluso exigieron la ausencia del president de la Generalitat si su homólogo rehuía la cita.

Esquerra Republicana de Catalunya y Junts han mantenido sus diferencias en torno a la mesa de diálogo con el Estado. Para los republicanos, la principal estrategia pasa por desencallar el conflicto político, mientras que la fuerza heredera de CiU ha mostrado con rotundidad sus críticas a este espacio pese a mantenerse partícipes.