Rechazo total a la oferta que Salvador Illa ha trasladado al president de la Generalitat, Pere Aragonès, tras recibir el portazo de la CUP el pasado martes. La negativa al PSC eleva a un primer plano a los Comunes, con quienes el republicano estaría dispuesto a negociar las cuentas públicas a pesar de que no le dieron su apoyo en la investidura.

Durante la sesión de control, el president, de hecho, ha recordado cuando fue ungido como máximo mandatario catalán. La formación morada dio la espalda entonces al acuerdo de Gobierno por la presencia de los postconvergentes en el mismo. “Pero esto es el pasado”, ha espetado Aragonès después de que recordara su invitación para “trabajar juntos”.

Carpetazo a los tiempos pretéritos y saludos a los nuevos. Este es el escenario que le ha quedado al republicano tras recibir el rechazo de la CUP. Por lo tanto, la única alternativa que les queda – excluyendo a las derechas – pasa por los comunes.

La líder morada, Jéssica Albiach, ha insistido en la sesión en su ofrecimiento y ha advertido al president de que nadie entendería que buscara aprobar las cuentas “por la mínima” cuando existen otras formaciones, ajenas al independentismo, que están dispuestas a negociar con el Govern.

Aragonès ha insistido que en su momento “les invité a trabajar juntos en la investidura”, aunque se topó con un portazo. “Pero eso es pasado”, apostillaba el president catalán, al tiempo que recogía con albricias la propuesta de Presupuestos y les instaba a sentarse para parlamentar “sin exclusiones de confianza”.

Albiach ha reprochado al Govern que las cuentas se pueden mejorar y Aragonès ha recogido el guante, admitiendo que siempre pueden existir aspectos a “discutir”. No obstante, ha defendido que su proyecto de Presupuestos es “bueno” y “transformador”.

“Hablemos, sentémonos y miremos la posibilidad de ampliar la mayoría que permitió la investidura con una mayoría más amplia para poder facilitar el Presupuesto”, ha zanjado el líder catalán. Entre tanto, Albiach insistía en que las cuentas no pueden entrar en el debate independentista, pues reivindica la necesaria conformación de un “único frente para la recuperación económica y las transformaciones que el país necesita”.

Rechazo total al PSC

El tono de Aragonès se ha arrugado en cuanto Salvador Illa ha tomado la palabra. El jefe del principal partido de la oposición, que previamente le había ofrecido una reunión para aprobar unos “Presupuestos de país”, ha encontrado el rechazo como respuesta a su oferta.

“Usted y yo no compartimos modelo de país”, le ha espetado el president de la Generalitat con una áspera contestación. Aragonès ha asegurado que su compromiso como máximo mandatario catalán es el programa con el que acudió a la investidura y que, por lo tanto, los Presupuestos transitarán en “esta dirección” que él mismo se niega a corregir.

Aragonès ha advertido a Illa de que pueden reunirse, pero estima que “puede aventurar” su respuesta. Además, ha subrayado que “nada es gratis” en política y que si le tienden la mano supondrá una “renuncia” a según qué posiciones de su investidura en un futuro.