La investigación del juez de Instrucción número 12 de Palma, Juan Manuel Penalva, continúa revelando nombres de cargos del PP relacionados con la trama corrupta de Palma: sexo, drogas, corrupción policial y mordidas. La trama, según el magistrado, estaba encabezada por el presidente del PP de Palma, José María Rodríguez, el “artífice en la sombra” del “organigrama criminal”.

Pero Rodríguez no es el único salpicado de la formación popular. Un comisario de la Policía Local de Palma aseguró al juez que "el Partido Popular fue creando un grupo de afines para conseguir dar puestos de consideración en la cúpula policial, previendo que no siempre estarían en el poder". De esta manera, dirigentes populares podrían continuar operando su trama corrupta independientemente del signo político. La elaboración de un nuevo organigrama del cuerpo les permitiría seguir al frente del entramado a pesar de pasar a la oposición.

Según los investigadores, el plan comenzó a fraguarse el 8 de marzo de 2011, día en el que se produjo una reunión en un bar propiedad de uno de los agentes imputados en la causa. Uno de los asistentes afirma que a esas reuniones acudía el que a la postre fuera alcalde de Palma (entre 2011 y 2015), el popular Mateu Isern, Rodríguez y Gijón entre otros.

El comisario mantiene que José María Rodríguez y Álvaro Gijón, regidor y diputado autonómico del PP, eran los cabecillas de la trama. Ninguno de los dos está imputado a pesar de que el sumario judicial les señala como los posibles encargados de dar las órdenes pertinentes a los agentes afines a la formación popular.

Varios cargos del PP ejecutaron un plan para controlar la cúpula policial y continuar con la trama aunque el signo político cambiara

Un testigo, afirma que recibió una llamada telefónica de Álvaro Gijón. En su conversación, el diputado del Grupo Popular mencionó a quién a la postre fue jefe del cuerpo municipal, a pesar de que el declarante le indicó a otra persona como el ideal pra ostentar dicho cargo.

Álvaro Gijón, el más señalado

El secretario general del PP de Palma y diputado autonómico, Álvaro Gijón, estaba al tanto de todos los entresijos del entramado y es uno de los más señalados por el sumario judicial. Gijón ostentaba el cargo de concejal de Seguridad Ciudadana durante el mandato de la alcaldesa popular Catalina Cirer (2003/2007), cuando se creó el Grupo de Actuación Preventiva (GAP), una unidad que, según señalan las pruebas, contaba con varios agentes que perpetraban actividades delictivas.