Lo nunca visto en Granada: una crisis política que ha sido capaz de contaminar nada menos que la procesión del Corpus, la más solemne y popular de la ciudad y a la que, para indignación de las asociaciones laicistas, nunca faltan las autoridades civiles.

En la procesión de esta mañana no han hecho acto de presencia ni los concejales de Vox ni tampoco el cabeza de lista del PP, Sebastián Pérez, aunque sí otros ediles de su grupo.

El plantón

Con ese vacío expresaban su irritación con el flamante alcalde Luis Salvador (Ciudadanos), a quien Vox y el PP han otorgado la vara de mando de la ciudad sin que, seis días después de haberlo hecho, se sepa si el primero tendrá concejalías en el gobierno local o si el segundo tendrá alcalde –en teoría, Sebastián Pérez– en la segunda mitad del mandato.

El momento de mayor boato tenía lugar a las diez y media de la mañana al entregársele, con la venia del alcalde, el Estandarte Real al concejal de Cs Manuel Olivares, encargado de portarlo escoltado por una guarnición militar del Ejercito de Tierra.

¿Comisión? ¿Qué comisión?

Y por si no hubiera ya bastante confusión con las declaraciones y pullas de unos y otros que se conocieron ayer, poco antes de la once de esta mañana el concejal del PP César Díaz publicaba este tuit en su cuenta oficial:

“El PP no ha creado ninguna comisión para definir el nuevo gobierno de Granada. Para negociar antes hay que cumplir los compromisos. Y de momento solo hemos cumplido VOX y Partido Popular”.

El dardo envenenado iba directo contra el alcalde naranja, que ayer dijo que se había creado una comisión de de PP y Ciudadanos para ir cerrando los detalles del pacto de gobierno.