Rajoy es un cínico: cuando le hacen una pregunta o no contesta o dice “si usted me lo pregunta en lo personal le diré que sí, que no lo haría”. Pero como ser presidente del Gobierno no es algo personal, entonces lo hace. Total, un cínico.

Qué valor tiene Zoido pa atreverse con ese toro. Hay que hablar en su jerga, para que les llegue más hondo. Ni Arenitas, el que pedía una oportunidad, aunque fuera por cambiar, como aquel torero, Platanito, pudo con semejantes cuernos. Pero Zoido ahí está, 'echao palante', embistiendo más que un Miura, pensando en montar su FAMP paralela y pepera: ¿una FAMPP? Y soñando con gobernar Andalucía.

Lo intentaron de muchas maneras: con la hija de Chaves (y no precisamente con un braguetazo), con los ERE... Resulta que con la hija del expresidente de la Junta había más ruido que nueces y al final hubo que preguntarse si los hijos de Manuel Chaves debían exiliarse a Estocolmo o, más lejos, Cochabamba, si de trabajar se trata. El caso es que al final con el putrefacto asunto de los ERE el PP no contó toda la verdad: y la verdad es que fue la propia Junta la que se denunció a sí misma, es decir, la que denunció el asunto, lo que estaba ocurriendo en su administración. El caso también es que los expedientes fraudulentos sumaban el 3% del total, es decir, que el 97% restante eran impolutos. Sin embargo, el PP ha dicho hasta la saciedad que los ERE en su totalidad es una golfería suprema.

Bueno, al final son ellos, los popularistas (para no llamarlos populares, por aquello de llamar a las cosas por su nombre) los que han puesto las palabras sobre el tapete. Descubierta tal carta, nombremos de verdad como golfería suprema a lo que hay que nombrar: y sí ese 3% de ERE fraudulentos, pero también toda la política entera de arriba a abajo de este Gobierno de Rajoy, amén de Gürteles y derroches fabrarianos. No se libra ni un sólo ministerio de una traición tras otra a cada uno de los españoles de a pie, con políticas que buscan la privatización en Sanidad y Educación, con políticas que fomentan el negocio de las armas, con políticas que no solucionan los problemas en Justicia, sino que los incrementan, alejando a los menos pudientes de la Justicia per se; con políticas que si destruyen los tres pilares del Estado del Bienestar, al cuarto, de reciente creación, el de la Dependencia, simplemente lo fulminan. Y así podemos seguir hasta toparnos con la inútil de Fátima Báñez. Pero no inútil como insulto, no. Inútil como descripción, como una ministra de Empleo que de ser socialista estaría siendo vilipendiada por tener más paro y encima frivolizar con tonterías como que la Virgen nos va a salvar o, su último éxito, el de que ya estamos saliendo de la crisis, cuando todo y todos apuntan a que no será así en 2013 y va 'pa' largo. Por cierto, que una vez puse en duda que la Virgen tuviera algún poder (sobrenatural) para salvarnos de la que se nos viene encima, la que ya tenemos, y me dijeron que esa vez me había pasado tres pueblos. Bueno, no tomaré el camino ateo, esta vez dejemos el asunto en que el dios Thor germánico tiene más poder, lamentablemente, que nuestra deidad sureña.

El caso es que de esta no nos salva ni Dios. Y no porque uno quiera ningunearlo, no es eso. Es que tenemos un gobierno, que además de ser un embustero (llegó al poder mintiendo), algo que no es nada nuevo, es un traidor. Esto antes se lo habían dicho a Zapatero, pero no con respecto al socialismo, sino con respecto a España. Bueno, Rajoy es el que saca Matrícula de Honor en todo caso. A Zapatero lo aprobaron los alemanes con un cinco raspado. Pero con Rajoy esto es otra cosa. Estamos, parafraseando a Bush respecto de Aznar, ante un gobernante valiente: valiente para traicionar a los propios españoles, para favorecer a los grandes capitalistas y para cambiar el Estado del Bienestar por un país donde vuelva a oler a rancio y a los curas se les lleve bajo palio.

Rajoy es un cínico: cuando le hacen una pregunta o no contesta o dice “si usted me lo pregunta en lo personal le diré que sí, que no lo haría”. Pero como ser presidente del Gobierno no es algo personal, entonces lo hace. Total, un cínico.

¿Y qué tiene que ver esto con Zoido? Pues todo. Zoido tendrá que aclarar a los andaluces cómo es posible que sus compadres de 'Despeñaperros pa arriba' no sean tan populares, en el sentido de ser o estar con el pueblo, es más, que estén vapuleando al pueblo, condenando a España a sufrir, sencillamente a sufrir sin necesidad alguna, pues hay medios para no tener que sufrir, y él en Andalucía esté prometiendo el oro. Ay, si aquí la gente sabe que el suyo es el que cagó quien dijimos.

Ígor R. Iglesias es lingüista y humanista.