'Da lo mismo, lo mismo da Page que Cospedal'. Este podría ser el cántico de una virtual protesta callejera de las ONG de Castilla-La Mancha tras confirmarse oficialmente que el Gobierno del socialista Emiliano García Page ha sumprimido las convocatorias de proyectos de cooperación internacional, "resucitando así la receta" de su antecesora del Partido Popular María Dolores de Cospedal.

La Coordinadora de ONGD de Castilla-La Mancha ha mostrado su indignación en un contundente comunicado en el que "alerta de las graves consecuencias que tendrá esta decisión sobre las poblaciones más vulnerables con las que trabajan las asociaciones de la región".

Recortes paralelos

Bajo el título 'Ante una crisis global, Page resucita la receta de Cospedal y da la espalda a la cooperación internacional', el texto denuncia que "el Gobierno de Castilla-La Mancha no está actuando a la altura de las circunstancias y ha adquirido un posicionamiento profundamente incoherente e insolidario frente a la necesidad de atajar en todo el mundo, y cuanto antes, la pandemia y sus consecuencias".

Anular las convocatorias de cooperación internacional –añade el comunicado– "tiene un gran impacto para las poblaciones con las que trabajamos, que además de vivir los efectos de la pandemia, están experimentando un aumento de los niveles de pobreza, hambre y desigualdad".

Los reproches de las ONGD castellano-manchegas a su Gobierno no son muy distintos de los que hacen sus homólogas andaluzas al Ejecutivo de Juan Manuel Moreno Bonilla, investido presidente con los votos de Vox, entre cuyas exigencias figuran los recortes en materia de cooperación. 

El pasado lunes, el presidente de la Coordinadora Andaluza de ONG, Héctor Rivero, advertía de que "justo cuando tenemos que atender a la devastación socioeconómica que la pandemia está dejando, la partida destinada a la cooperación vuelve a ser recortada", un hecho que atribuyó a "las implicaciones del acuerdo entre PP, Ciudadanos y Vox para la aprobación de los próximos Presupuestos de la comunidad".

¿Qué fue de la Agenda 2030?

Fue el pasado 13 de noviembre cuando la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha informó a la Coordinadora de ONGD de Castilla-La Mancha que suprimía las convocatorias de cooperación internacional de 2020, haciendo oídos sordos al llamamiento de las organizaciones a “no dejar a nadie atrás” y asumir los compromisos establecidos en la Agenda 2030. La decisión de García-Page sitúa a la región "a la cola del resto de Comunidades Autónomas que sí han apostado y respetado sus compromisos".

Para la coordinadora castellano-machega, "no es entendible que un gobierno autonómico que en mayo firmó una declaración conjunta con el resto de autonomías declarando que 'de la crisis se sale cooperando', y que criticó duramente los recortes en cooperación internacional del Gobierno de Cospedal, ahora utilice la misma receta y elimine las partidas de Cooperación y Educación para el Desarrollo". 

Los cooperantes le recuerdan al presidente socialista que "la Cooperación Internacional para el Desarrollo de Castilla-La Mancha debe ser una política pública digna y estable, y no es una limosna voluntaria que se decide sobre la marcha. Es una necesidad vital para millones de personas, un imperativo de justicia social hacia las poblaciones más vulnerables y un compromiso hacia una ciudadanía castellanomanchega que siempre ha apoyado y defendido la solidaridad internacional".

En la línea... ¿de Vox?

La política de recortes en cooperación de García Page en Castilla-La Mancha va en una línea no muy distinta a la exigida por Vox en Andalucía al Gobierno de PP y Cs. Ya en enero del año pasado, cuando ambos partidos cerraron con la ultraderecha el acuerdo de investidura de Juan Manuel Moreno, las ONGD andaluzas denunciaron que el pacto ignoraba "la legislación estatal y era contrario al Estatuto de Autonomía de Andalucía al apostar por la eliminación de la política regional de cooperación internacional".

El punto 37 de aquel primer acuerdo de 2019 comprometía al Gobierno andaluz “a trabajar para que, en el marco de las ayudas a la cooperación internacional al desarrollo, se den pasos decididos hacia una gestión nacional de estos recursos”.

El pasado día 18, la formación de extrema derecha daba un paso más, y menos disimulado, en esa misma dirección cuando firmaba un nuevo acuerdo por el que garantizaba a Moreno la aprobación de los Presupuestos de 2021. El punto 18 de los 32 que contiene el pacto presupuestario dice así:

"La situación actual económica de la Comunidad Autónoma está alcanzando niveles extremadamente preocupantes, en los que el auxilio y la atención social es imprescindible abordarla con decisión, especialmente frente a colectivos altamente vulnerables, mediante ayudas que permita asegurar completamente su destino final. Por otra parte, determinadas políticas de cooperación internacional al desarrollo podría ser necesario ralentizarlas parcialmente en estos momentos hasta que se recupere la estabilidad económica.

Por ello se acuerda proceder a modificar el Presupuesto de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional (ACCID) en 3 millones de euros para un programa con destino a la Consejería de Igualdad para una subvención al Banco de Alimentos, por dicha cantidad para la solución de los graves problemas de pobreza alimentaria que se observan en estos momentos". Fin de la cita.