El expresidente de la Junta de Andalucía Manuel Chaves ha comparecido esta mañana en la comisión de investigación sobre la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe) del Parlamento, pero lo ha hecho solo unos minutos, poco más de diez: los suficientes para anunciar a sus señorías que se acogía a su derecho a no declarar y que abandonaba la sala escudado en que su citación a tres días del 10-N era "un acto electoral" que vulneraba la "neutralidad" a que está obligado todo Parlamento en periodo electoral.

Nunca había sucedido que una comisión de investigación encallara el primer día de su entrada en funcionamiento. La causa: el empeño de las tres derechas que tienen mayoría parlamentaria en citar en plena campaña electoral a tres ex presidentes y una ministra del Partido Socialista.

Entre los argumentos aducidos por Chaves para su acto de 'rebeldía' figura destacadamente que el propio Parlamento ha suspendido en estas fechas toda su actividad electoral, salvo la de esta comisión.

El presidente de la comisión de investigación, Enrique Moreno (Cs), a quien se le ha notado en exceso su bisoñez en estas tareas, le ha pedido a Chaves que se quedara a escuchar las preguntas que le iban a formular los grupos. Tras su marcha, el presidente de la comisión ha decidido suspender la sesión.