A bordo de sus vehículos privados, entre los que no faltaban los de primeras marcas, miles de seguidores andaluces de extrema derecha se han echado hoy a las calles en las ocho capitales para pedir la dimisión de Pedro Sánchez por haber “abandonado a nuestros autónomos y trabajadores" y para “responder a las provocaciones e insultos de los progres y sus terminales mediáticos".

Hubo, como era de esperar, guerra de cifras. Y la hubo hasta límites de verosimilitud más que problemática: en Sevilla la Policía Nacional cifraba la asistencia en 400 vehículos y apenas unas 200 motocicletas, mientras que los organizadores ultras elevaban la cifra nada menos a que 15.000 coches. Vistos, en todo caso, los muchos claros que había entre los coches en la avenida de la Palmera de Sevilla, se diría que la cifra 'oficial' de 15.000 vehículos no ajusta demasiado a la verdad.

La manifestación motorizada de Sevilla fue animada con canciones de José Manuel Soto, conocido simpatizante ultra, pero también de Nino Bravo. Las proclamas más escuchadas reclamaban libertad.

En el resto de capitales andaluzas también hubo caravanas de protesta, con cientos de vehículos sumándose al llamamiento de Vox, cuyo comunicado proclamaba:" Es hora de hacer una gran pitada contra el Gobierno del paro y la miseria que ha abandonado a nuestros autónomos y trabajadores.

El PP no se ha sumado a la convocatoria, pero la ha acogido con simpatía. La vicesecretaria de Organización del partido, Ana Beltrán, ha expresado su respeto a las protestas y manifestaciones que se están convocando contra el Gobierno de Pedro Sánchez porque la "gente está harta; mientras se respeten las medidas sanitarias y sean unas concentraciones o manifestaciones pacíficas, adelante con ellas. Entiendo mucho que la gente esté con un malestar absoluto por la gestión de Pedro Sánchez y que salgan por fin a la calle a denunciarlo, de forma pacífica insisto", ha declarado Beltrán en una entrevista en esRadio, que ha recogido Europa Press.